La sala Cuarto Espacio de la Diputación Provincial de Zaragoza acoge la exposición Refugiados, la huida invisible, que recopila fotografías de reporteros tomadas en diferentes momentos y lugares, pero todas con un nexo en común: hombres, mujeres y niños que huyen de la guerra y la desesperación, y con el fin de remover conciencias y despertar la solidaridad. Son 44 imágenes de siete autores distintos, que han cedido su obra de forma altruista para esta exposición, organizada por Arapaz-MPDL Aragón y Unesco Aragón, y que permanecerá expuesta hasta el 21 de mayo.

Aunque tomadas en distintos países del mundo, como Grecia, Afganistán, Irak o Líbano y en años diferentes, las fotografías muestran la desesperación de los refugiados, que huyen de sus hogares, como ocurrió en Europa tras la II Guerra Mundial.

La exposición empieza con las fotografías del primer convoy que salió del Hospital Provincial de Zaragoza para Bosnia en 1993, realizadas por el periodista de EL PERIÓDICO DE ARAGÓN, Ángel de Castro, hace 24 años. De Castro, quien retrata en las imágenes a un padre delante de la tumba de su hijo en Mostar o a niños tras las concertinas en un asentamiento para desplazados, recuerda que llegaron a una ciudad totalmente derruida por los bombardeos. «Impresionaba toda la gente que estaba llorando a sus muertos», señala De Castro, quien al ver las imágenes de Siria reconoce el mismo drama.

Las fotografías expuestas de Ángel De Castro, Camino Ibarz, Fernando López Sierra, Juancho Barrecheguren, Rubén Darío, Rut Zumel y Uhegun están a la venta por 150 euros, con el objetivo de destinar e dinero recaudado a ayudar a los refugiados a través de la oenegé Arapaz-MPDL.