Según denuncia Oxfam Intermón, los objetivos políticos y militares en la lucha contra Boko Haram se han antepuesto a la respuesta humanitaria a esta crisis, a la que gobiernos, organizaciones humanitarias y donantes tardaron demasiado en responder. Por suerte, recientemente se ha puesto en marcha una importante operación humanitaria que ya ha salvado muchas vidas. Pero sin una inyección masiva de fondos, muchas vidas continuarán en peligro.

Hasta una treintena de organizaciones humanitarias han publicado una declaración conjunta en la que proponen a los gobiernos, la ONU y los donantes siete medidas que deberían adoptar: situar la protección de la población civil en el centro de la respuesta; ampliar la respuesta alimentaria en Nigeria y la región; incrementar el acceso a una mayor y mejor educación; salvaguardar el espacio humanitario; fortalecer el liderazgo de la respuesta y mejorar la coordinación humanitaria; garantizar retornos voluntarios, seguros y dignos; desarrollar la resiliencia e incrementar la capacidad local.