El consejero andaluz de Educación, Luciano Alonso, ha rechazado hoy el "chantaje" que, a su juicio, supone que se deba estar de acuerdo en la implantación de la Lomce para recibir financiación en educación, como ha dicho la secretaria de Estado de Educación, FP y Universidades, Montserrat Gomendio.

En una rueda de prensa para presentar el balance del último curso escolar, Alonso ha subrayado que el Gobierno "no puede hacer un chantaje a esta comunidad autónoma diciendo que la financiación de esa Lomce que ellos han impuesto tiene que hacerse con un tipo de situación parecida a la inquisición, cuando obligaban a bautizarse y a aquella cosa de la conversión".

Alonso ha enfatizado que desde el Gobierno se incurre en un "chantaje" porque ha elaborado una ley de educación orgánica sin memoria económica "para tener que firmar unos convenios con el Fondo Social Europeo, por primera vez en la historia, y se firma con empleo", ha apostillado.

La respuesta de Alonso se ha producido después de que Gomendio dijera ayer que "las comunidades que quieran implementar esos cambios conseguirán la financiación y las demás, no".

"Nos obliga a las comunidades autónomas a que aceptemos algo en lo que no hemos creído y algo que hemos recurrido", ha señalado el consejero tras lamentar la poca cultura democrática que existe en el Ministerio de Educación.

La culpa de esta práctica, según el consejero andaluz, la tiene el presidente Mariano Rajoy, y no el "inefable" ministro José Ignacio Wert, que no tomaría esas medidas sin su consentimiento.

Además, ha reiterado que la decisión de Andalucía de impartir 45 minutos de religión a la semana no se adopta "contra nadie" y es el mismo tiempo que se dedicará en comunidades como Galicia, gobernada por el PP, o en Ceuta y Melilla, cuyas competencias educativas corresponden al Gobierno central.