Artur Mas se sentará este lunes en el banquillo por haber organizado la consulta del 9-N. Parece tranquilo, convencido de lo que hizo y de que es víctima de una maniobra del PP.

-Ante el juez se declaró máximo responsable de haber tomado la iniciativa política y haber ideado el 9-N. Si no es una autoinculpación se le parece mucho.

-Inculpación no porque no somos culpables. Es una manifestación de autorresponsabilidad, que es muy diferente. Dije que éramos responsables pero de ninguna manera somos culpables legalmente del 9-N. No somos delincuentes, somos demócratas. Y eso es lo que le dije al juez.

-La Fiscalía afirma que usted amparándose solo en su voluntad decidió no suspender la convocatoria de la consulta pese a que era su obligación, y que hizo ver que lo dejaba en manos de voluntarios cuando no era así. ¿Quién organizó el 9-N, el Govern o los voluntarios?

-El 9-N lo tenía que organizar el Govern a través de una consulta con el amparo de una ley del Parlament. Hicimos el decreto de la consulta a finales de septiembre, el Tribunal Constitucional a instancia del Gobierno del PP se lo cargó y cambiamos la consulta por un proceso participativo. Dijimos: ¿Esta consulta no la puede organizar directamente la Generalitat? Pues haremos un proceso participativo e invitaremos a voluntarios. Necesitábamos 20.000 y tuvimos 40.000 ¿Qué hizo la Generalitat? Ofrecer la logística, los servicios y toda la infraestructura para que se pudiera llevar a cabo. Tened en cuenta una cosa que es muy importante: nosotros recibimos la comunicación de suspender cuatro días antes de la consulta. En aquel momento estaba todo organizado.

- Pero hubo una segunda advertencia, y se desobedeció.

-No se desobedeció, se constató que nos comunicaban que había esta suspensión. Se les pidió a través de un escrito que nos aclararan qué se tenía que suspender. Y ya no nos contestaron. Yo me pregunto: Si aquello era un delito y era tan evidente cómo es que los nueve fiscales del Tribunal Superior de Justícia de Cataluña dijeron por unanimidad que no había indicios de delito. ¿Y los jueces? No hicieron nada. ¿Y el Tribunal Constitucional? Tampoco hizo nada.

-Si es así, ¿por qué hay un juicio?

-Aquí no hay un delito. Lo que hubo fue urnas y en lugar de una costellada fueron a votar 2 millones 340 mil personas. Eso les irritó y casi encabritó. La reacción que tuvieron fue obligar a la Fiscalía General del Estado a cambiar la opinión de los fiscales de Cataluña y presentar la querella. Por eso estamos en el juicio, por el éxito del 9-N. Y una cuestión técnica: La notificación del tribunal ha de ser reiterada, se te tiene que advertir varias veces de que estás pudiendo cometer un delito. A nosotros no se nos dijo esto. Se nos envió un correo electrónico. No vino ningún oficial de ningún juzgado. Esto no es un juicio legal. Vaya, es un juicio legal de acuerdo con la normativa española. Pero no es un juicio de base legal. Es un montaje político del Gobierno español a través de sus instrumentos.

-El Gobierno central también ha dejado claro que no piensa moverse e incluso habla de precintar escuelas. ¿La alternativa es un referéndum unilateral, pase lo que pase?

-La intención es hacer el referéndum. Esto es lo que me consta. ¿En qué confío? En que igual que mi gobierno, en el 2014 y en circunstancias diferentes, encontró la manera de poner las urnas, esta vez, no para hacer un proceso participativo sino un referéndum, el Govern encontrará la manera de poner las urnas.

-¿El 48% de votos que obtuvieron los partidos independentistas en las últimas elecciones es suficiente para optar por una vía unilateral?

-Para hacer un referéndum creo que sí, porque tenemos mayoría absoluta en el Parlament. Para declarar la independencia, con el 48%, no. Eso lo hemos dicho desde el primer día. Precisamente por eso se hace el referéndum. Porque se considera que con el 48% no hemos podido aún contarnos definitivamente, y sobre todo con un partido, que es el de los comuns y Podemos, que no se dejó contar ni en el sí ni en el no, en el plebiscito de septiembre del 2015. Por tanto esto lo tenemos que aclarar. Algún día los catalanes nos hemos de poder contar con transparencia. Cuánta gente hay a favor del sí y cuánta gente hay a favor del no. Y según el resultado, tomaremos las acciones de una manera o las tendremos que tomar de otra.

-Pero los del no igual no participan. ¿No sería mejor contar el número de votos en unas elecciones?

-El Govern y la mayoría parlamentaria han decidido sacar adelante un referéndum y hay que ayudarlos. Yo políticamente hablando, en los momentos más cruciales, más decisivos, me encontré solo, y no lo digo por mi partido. No quiero que los que están ahora se encuentren solos. Por lo tanto si Junts pel Sí y el Govern dicen que hay que hacer el referéndum, pues oye, alineados en la línea de hacer el referéndum.

-¿Si llega a un momento de tensión social no debe prevalecer el deber de responsabilidad del gobernante?

-Lo que no entiendo es cómo un potencial deber de prudencia concierne solo a una parte y no a la otra. Porque el principal deber de prudencia es que el Gobierno español no vaya en contra de la opinión del 80 % de los catalanes. Si el Gobierno español fuese democrático, prudente y sabia no iría en contra de ese 80%. Por lo tanto, ¿dónde está el problema, en el 80 % de catalanes que quieren un referéndum para decir sí o no, o en la posición férrea, decimonónica de un Gobierno español lleno de altos funcionarios que solo están protegiendo su statu quo y sus intereses.

-Entenderá que haya gente asustada. Algunos incluso votantes o exvotantes de su partido.

-Puedo entender que hayan unos ciertos temores. Pero dejádme volver al 9-N para responder. Ese fue un gran acto de libertad de Catalunya, de decirle al Estado: no os tenemos miedo. Y cuando le pierdes el miedo a alguien, al día siguiente eres mucho más libre. Es posible que haya gente que tenga temores. Pero yo pido a quien le pase esto que pierda el miedo. Primero porque no pondremos a nadie en una situación de indefensión, no es este el propósito. Y segundo: ahora es el momento de plantar cara, demostrar el carácter que tiene Catalunya. Cuesta después de tres siglos de una cierta sumisión. Pero debemos perder el miedo a tener miedo.

-Igual usted tiene más información, porque se está hablando de la posibilidad de adelantar el referéndum a antes del verano, pero no se ha explicado cómo se va a hacer.

-Seguro que se están dando pasos, yo no puedo deciros cuáles, pero seguro que se están dando pasos para prepararlo ¿eh? Y por tanto dentro de la normalidad y dentro de la legalidad. Además, hay una persona que está al frente del operativo, que es el vicepresidente del Govern.

-En el PDECat hay quien afirma, en privado, que el referéndum se convocará pero no se hará.

-Esto me recuerda al 9-N, a mí también me lo decían algunos, lo convocaremos pero no lo haremos. Pues mira, no es verdad, porque si pones determinación, imaginación y astucia, lo puedes llegar a hacer. Ahora, si te haces el mil hombres y apareces como el más valiente del mundo, como si todos los demás fuesen unos cobardes, entonces normalmente te estrellas contra las rocas. Pero David puede ganar a Goliat.

-La CUP acusando a los Mossos, la Fiscalía enviándolesinstrucciones sobre cómo tienen que actuar, la 'consellera' de Governació animando a los funcionarios a cogerse fiesta mañana para acompañarle a usted... ¿No sería mejor dejar en paz a los funcionarios?

-Se les ha dejado totalmente en paz. Es la pauta que siempre se instala es la misma: no pondremos a los funcionarios contra las cuerdas ni entre la espada y la pared, para hacer aquello que ellos consideren que no pueden o no quieren hacer. Prueba de eso es que los que participaron en el 9-N del año 14 actuaron como voluntarios porque quisieron. Si un empleado público sin que haya ninguna lista de nadie, libremente quiere ir y dar apoyo a los que entraremos en el tribunal, eso se ha de respetar, no es ninguna obligación, es una voluntad de cada persona libremente ejecutada. Es más, muchas veces hemos criticado acciones de la CUP para poner a los Mossos en la tesitura de haber de detener a gente cuando no tienen ninguna voluntad especial, pero lo tienen que hacer.

-¿Qué le parece que el 'conseller' Toni Comín diga que hay que desprivatizar la sanidad?

-Pues que no es real, porque la sanidad pública nunca ha estado privatizada. No se puede desprivatizar aquello que no se ha privatizado, es imposible.

"ES IMPOSIBLE AHORA DEFINIR LAS CANDIDATURAS"

-¿Si la justicia le inhabilita, seguirá sin descartarse como candidato del PDECat?

-Depende de la situación de país en que nos encontremos. Si estoy inhabilitado y estamos todavía en el régimen autonómico bajo legislación y marco jurídico español, no me podré presentar. Si estoy inhabilitado con sentencia firme, pero estamos bajo un marco jurídico diferente que no sea el español, sino que sea el del estado catalán, evidentemente supongo que me podré presentar porque me amnistiarán. Supongo. Por tanto, depende.

-Un tándem Neus Munté-Artur Mas para la lista de Barcelona, y Carles Puigdemont-Santi Vila para la de Girona. ¿Qué hay de cierto?

-Entiendo que haréis, y se harán un montón de especulaciones. No os puedo decir que os lo ahorréis, porque no lo vais a hacer, las haréis igualmente. Pero dejadlo correr porque no estamos en esta fase. No se está diseñando este tipo de candidatura ni ninguna otra. Es cierto que la autoexclusión del 'president' Puigdemont nos obliga seguramente a ir un poco más rápido en alguna definición desde un punto de vista de esquema electoral, pero no hay ninguna urgencia inmediata. Insisto, no sabemos en qué escenario electoral nos encontraremos. Es imposible definir unas candidaturas ahora que finalmente tienen que poder servir algún día, o por un esquema autonómico si no hemos podido impulsar un Estado catalán, o por un esquema soberanista si lo hemos logrado. Son dos fases completamente diferentes.

-¿Es cierto que la condición que le puso Puigdemont para ser presidente es que no sería candidato?

-Sí, la condición que me puso el 'president' Puigdemont el día 9 de enero del 2016, sábado al mediodía, fue esta. La única condición, no me puso ninguna más, por lo tanto es evidente que no se le puede ni criticar ni apartar porque él está actuando con plena transparencia y con plena coherencia. Cuando un político actúa así se tienen que entender y respetar sus razones. Es una condición taxativa que puso desde el primer día y no la ha querido cambiar, aunque a mí me hubiera gustado que la cambiase, y ya está.

-Su amigo y presidente del puerto de Barcelona, Sixte Cambra, es uno de los nombres que ha aparecido en la última operación policial contra su partido. ¿Convencido de que es inocente?

-Una persona impecable. Estoy 100% seguro de que no encontrarán nada, está todo bien hecho. Forma parte del montaje. Estamos acostumbrados. Tengo varios ejemplos. Elecciones del 2012. Encuestas muy a favor nuestro. Mucho. Gran montaje de guerra sucia contra mí, con un montón de información que después se demuestra falsa. Elecciones municipales del 2015. Objetivo de algunos: quitar a Trias. ¿Qué hacen? Lo acusan de tener cuentas ilegales. Resultado: totalmente falso. Plebiscito del 2015, primer día de campaña: la Guardia Civil registrando la sede de CDC. Y ahora, ¿dónde estamos? Se juzga por primera vez a un presidente y a un gobierno democrático por poner las urnas.