EL PRESIDENTE del Parlamento Europeo, Josep Borrell, instó ayer a los eurodiputados a que no utilicen en las actividades de la institución idiomas sin el estatuto de lengua oficial de la UE, como sucedió en el anterior pleno con el catalán y el gaélico. Borrell advirtió de que se verá obligado a "exigir el cumplimiento del reglamento" lingüístico que, recordó, fija el Consejo de la UE y, mientras no se modifique, agregó, "no hay otra posibilidad". E. O.