La nueva ministra de Justicia ha empezado presentándose. "Soy Dolores Delgado y es un honor estar aquí. Es un verdadero un orgullo" incorporarme a"Justicia, que es lo que he hecho toda mi vida y les aseguro que me encanta". Y con ese entusiasmo que consiguió trasladar al auditorio, la flamante ministra "de trinchera", como más tarde dijo querer ser, desgranó su programa para el resto de legislatura sin olvidarse de la "transparencia", los operadores jurídicos, las víctimas y hasta de las asociaciones judiciales y fiscales, que el pasado 22 de mayo hicieron la primera huelga conjunta de la democracia.

En un acto al que por primera vez no asistió el ministro saliente, Rafael Catalá, que se excusó con un acto en Cuenca para hacerle entrega de la cartera en la otra sede del ministerio, sin ni siquiera presencia de los familiares de Delgado, la nueva ministra anunció que "empeño, ganas, ilusión y fuerza" no le van a faltar en "la nueva etapa que arranca", de la que "la sociedad espera mucho".

En ella, dijo, "la transparencia tiene que ser muy importante, los operadores jurídicos y hay que contar con las asociaciones, con las víctimas y por las víctimas", porque para "ser solventes y eficaces hay que trabajar todos juntos para hacer de esta una justicia del siglo XXI".

Para luchar contra el terrorismo

Se declaró "militante activa de la cooperación internacional, tanto con Europa como con América Latina" y destacó la importancia de "las confesiones religiosas", porque "algunas de las soluciones a grandes soluciones, como puede ser el terrorismo", en el que ella es especialista, "vienen por comprender al otro, lo diferente".

La ministra aseguró que no "va a faltar ilusión" en su nuevo cometido, aunque admitió que aún debe montar su equipo, para lo que "hay muy buena gente esperando" y, añadió, y ella, "con ganas de que quieran".

En un corrillo informal con periodistas explicó que ni los nombramientos de Justicia ni el fiscal general que sustituirá a Julián Sánchez Melgar no irán al consejo de ministros de este viernes. Señaló que iba a aplicar la recomendación que le habían hecho de "mejor tardar que equivocarse".

No a este Consejo de Ministros

Explicó que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, le ofreció el ministerio este sábado, pero antes había habido un encuentro, que negó que se hubiera producido antes de la moción de censura. Recordó que una compañera la había definido como "fiscal de trinchera" y que ella quería ser "una ministra de trinchera", lo que llevó a que se bromeara con el "fuego cruzado", en un Ejecutivo en el que hay dos jueces: Margarita Robles, en Defensa, y Fernando Grande-Marlaska, en Interior.