Esperanza Aguirre se va... ahora sí. La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid ha renunciado esta tarde al acta de concejal y a su puesto de portavoz en el grupo municipal del Ayuntamiento de Madrid tras el estallido de la operación Lezo, una trama de corrupción por la que se encuentra entre rejas su sucesor en la presidencia de la Comunidad de Madrid, Ignacio González.

"Me siento engañada y traicionada", ha señalado en una breve declaración ante la prensa sin preguntas en la que ha manifestado que asume su "responsabilidad" por no haber "vigilado" y "descubierto antes" los tejemanejes que ahora ha puesto sobre la mesa el juez del caso, Eloy Velasco.

Aguirre ha explicado que, ante las primeras informaciones sobre el presunto cobro de comisiones, a raíz del caso del ático en Marbella de González, pidió a su delfín "explicaciones" y ante sus escusas "exhaustivas" no continuó con su "vigilancia", por eso dimite ahora de concejal y portavoz del grupo municipal.

Aguirre ya dimitió como 'lideresa' de los populares madrileños en febrero del 2016, tras el encarcelamiento de Francisco Granados, su otro hombre de confianza durante su etapa en el Gobierno regional.

Desde que se conoció la detención de González, la dirección del PP ha estado empujando a la expresidenta madrileña hacia la dimisión, pero esta, en sus últimas declaraciones públicas, mantenía que no tenía intención de renunciar al acta. Pero el devenir de las investigaciones sobre el lucro ilícito de su sucesor pero también sobre la financiación del PP madrileño, puesta ya en cuestión por varias causas judiciales, ha supuesto la estocada al ‘aguirrismo’.