Ante el acoso al que la oposición ha decidido someter al Gobierno por las pensiones, aprovechando la ola de indignación que recorre las calles, el Gobierno y el PP han salido este miércoles al ataque. El primero, acusando al PSOE, que el martes presentó su propuesta para ligar las prestaciones de los jubilados a la subida del IPC, de hacer "populismo puro y duro" con este tema, mientras que el segundo ha emprendido una ofensiva en Twitter para difundir que las pensiones "están garantizadas".

Ha sido el portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, el que ha descalificado al principal partido de la oposición, señalando que volver a ligar la subida de las pensiones al IPC es una "mala idea" y recordando que existe un Pacto, el de Toledo, en el que los grupos acordaron proponer las reformas necesarias en el sistema, fuera de las luchas partidistas.

Asimismo, el también ministro de Educación ha recordado, como lleva haciendo toda la semana el PP, que el PSOE, con el "voto de su actual secretario general", congeló las pensiones durante la etapa de José Luis Rodríguez Zapatero. "Este Gobierno quiere dar trigo, en lugar de predicar", ha setenciado en una entrevista en la 'Cope'.

LOS DARDOS A C'S

El Gobierno no sólo se encuentra acosado por la revuelta de los pensionistas y la presión de la oposición sobre este asunto, sino que Cs, su socio de investidura, después de que el PP pasara al ataque por el temor que provoca en sus filas el empuje de la formacion de Albert Rivera, ha decidido dejar caer algunas de sus reformas, como la llamada 'ley mordaza'.

Esta situación deja al Gobierno en una situación cada vez más inestable, máxime cuando se va agotando el plazo de finales de marzo previsto para aprobar los presupuestos sin que se vislumbre una mayoría favorable. En este contexto, Méndez de Vigo ha recordado a Ciudadanos que firmaron un pacto para "cuatro años" y que no ve motivos para adelantar las elecciones puesto que el acuerdo con su socio de investidura "está cumpliéndose".

Asimismo, ha recordado a la oposición, que quiere derogar las principales leyes de Rajoy, que el "éxito de España se debe a las reformas estructurales y sus políticas presupuestarias".