El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha asegurado este martes que el Gobierno no tiene "ningún temor" a que Suiza pueda ofrecer asilo político a la dirigente de la CUP Anna Gabriel, a quien ha advertido de que España es un Estado "modélico" en el que las incomparecencias ante los tribunales acarrean "consecuencias jurídicas".

A preguntas de la prensa tras inaugurar una feria, Zoido ha subrayado que España tiene un modelo judicial "copiado por todos los países modernos" y que, por tanto, "discrepa" de la decisión de Gabriel de no presentarse ante el juez del Supremo Pablo Llarena al considerar que no está garantizado que tenga un juicio justo.

"En España vivimos afortunadamente en un Estado de Derecho donde la división de poderes está garantizada de manera clara y evidente", ha señalado Zoido. Sobre la decisión de Gabriel ha indicado: "Ella no hará caso, si quiere, a la citación que un tribunal le haga pero tendrá que pagar las consecuencias previstas en el ordenamiento jurídico para aquel que no quiera acudir a una citación judicial".

"El juez lo determinará"

"Será el juez o tribunal el que tenga que dictar las medidas correspondientes como consecuencia del incumplimiento", ha apostillado. Al ser preguntado si hay temor en el Gobierno por la posibilidad de que Gabriel pida asilo político y que sea concedido por Suiza, el ministro del Interior ha respondido que no.

"No hay ningún temor en ese sentido", ha indicado, repitiendo que España es "un Estado de Derecho". "Parece mentira que haya alguno que quiera criticar este modelo, insisto, con tantas garantías como el español", ha concluido.

Más reacciones del Gobierno

El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha asegurado que Gabriel tendrá que "dar la cara" ante la justicia. "Es un nuevo hecho que demuestra la situación de esta persona. Tendrá que hacer frente a sus responsabilidades y tendrá que dar la cara ante la justicia", ha expresado. En la misma línea, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha acusado de "gravísima irresponsabilidad" a la cupaire.

Mientras que el delegado del Gobierno en Catalunya, Enric Millo, ha criticado duramente a la exdiputada de la CUP al considerar que su decisión no es "valiente". Ella y otros dirigentes independentistas fueron "muy valientes para tomar algunas decisiones, pero no lo son a la hora de rendir cuentas ante la justicia", ha sostenido.