En la Moncloa se ha seguido con atención el discurso de L'Auditori. Mariano Rajoy tiene previsto viajar a Barcelona el próximo sábado y estaba pendiente para conocer la hoja de ruta de Artur Mas para preparar su intervención. Fuentes gubernamentales consideran que el discurso de anoche es "un paso más en la deriva independentista" de Mas , pese a que "la mayoría de los catalanes" no le acompañan en su proyecto y cada vez cuenta "con menos apoyos entre la sociedad catalana". Estas fuentes subrayaron que Catalunya necesita una Generalitat que se ocupe de resolver los problemas de los catalanes y "no de las obsesiones e intereses políticos" del 'president'.

El Ejecutivo central asegura que seguirá "velando por el cumplimiento de la legalidad" y defendiendo los derechos de todos los españoles, "también las preocupaciones de los ciudadanos de Cataluña".