El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha exigido formalmente este viernes a la Intervención de la Generalitat que expliqué cómo se ha pagado el vídeo institucional en el que la institución anima a participar en el referéndum del próximo 1 de Octubre. También quiere saber Montoro cómo se financia la web oficial sobre el referéndum (referendum.cat) donde se recoge la normativa electoral, se ofrece la posibilidad de colaborar en la votación y se formulan preguntas y respuestas sobre el procedimiento y la forma de votar.

Montoro quiere asegurarse de que la Generalitat no está utilizando "ni un solo euro público" en el referéndum pues de lo contrario podría cortar la financiación que el Estado hace llegar al Govern a través del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA).

"Ya hemos hecho a lo largo del día de hoy un apercibimiento a la Intervención de la Generalitat para que nos justifique y explique la utilización de la página web de la Generalitat y el uso de un vídeo que promueve esa campaña", ha dicho Montoro antes de participar en Zaragoza en la reunión intermunicipal del PP que el propio Mariano Rajoy prevé clausurar este sábado. Dirigentes y miembros del PP han aprovechado el encuentro en la capital aragonesa para cerrar filas en torno a su presidente y a la estrategia del Gobierno frente al desafío independentista catalán. "Tendrán que justificar de dónde vienen esos recursos para este primer paso de promoción", ha advertido el titular de Hacienda.

"El Gobierno garantiza que no se ha utilizado un solo euro público en el referéndum. Si se hubiera utilizado, habría sido de manera fraudulenta e ilegal y no se ha utilizado" ha dicho el ministro. Montoro ha recordado que a comienzos de julio el Tribunal Constitucional ya declaró ilegal la parte del presupuesto de la Generalitat asignado a la consulta.

El grifo del dinero

Desde su sede del Ministerio de Hacienda, el ministro Montoro se ha convertido en uno de los puntales claves dentro de la estrategia del Gobierno para enfrentar el desafío soberanista. En sus manos están las normas que permiten abrir o cerrar el grifo de la financiación a una administración, como la catalana, fuertemente endeudada, sin posibilidad de acceso a los mercados financieros y con un abultado déficit presupuestario. En julio, el Gobierno acordó someter a la Generalitat a un estricto seguimiento semanal de sus pagos bajo la amenaza de suspender la financiación del FLA si se detectaba que "un solo euro" servía para financiar la convocatoria del referéndum.