El PSOE está dispuesto a plantear una moción de censura si la presidenta madrileña, Cristina Cifuentes, no despeja las presuntas irregularidades sobre su máster en la comparecencia prevista ante la Asamblea, el próximo miércoles. El secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, ha exigido a la dirigente popular que esclarezca de forma "contundente" la polémica y ha advertido de que, si no lo hace o si sus explicaciones son inverosímiles, su partido tomará decisiones "también contundentes".

Sánchez ha lanzado este "aviso" a la presidenta sin concretar los términos en los que se plasmaría la moción porque, aduce, prefiere no "adelantar escenarios" hasta que Cifuentes comparezca en sede parlamentaria y pueda ser preguntada por la oposición, que le reclama explicaciones desde que estalló la polémica, hace dos semanas. "Estamos avisando de que Cifuentes tiene obligación de dar explicaciones, si no lo hace actuaremos en consecuencia", ha señalado el jefe de los socialistas.

Fuentes del PSOE admiten que observan poco margen de maniobra en Cifuentes y sugieren que, o bien dimite, o bien se verá abocada a una moción de censura que, subrayan, deja en un lugar incómodo a Ciudadanos, con quienes la presidenta pactó su investidura y a quienes recurre para obtener mayorías. "No miraremos ni a izquierda ni a derecha, actuaremos en consecuencia", ha advertido Sánchez.

Sin el apoyo del partido de Albert Rivera la moción no podría prosperar, puesto que PSOE y Podemos carecen de fuerza suficiente, hecho que sitúa la presión sobre los naranjas. Si Cifuentes no logra desmontar las presuntas irregularidades pero tampoco dimite, el futuro de la Asamblea de Madrid queda, en buena medida, en manos de Cs. En un contexto tan complejo, a nadie se le escapa que para socialistas, ciudadanos y podemistas el mejor escenario sería lograr que Cifuentes dimita y que sea sustituida por un dirigente de perfil bajo que no remonte la erosión del escándalo y asfixie la campaña del PP para las autonómicas y municipales del 2019.