La salida de la crisis debería alumbrar también una sociedad más justa e igualitaria. Ese es el axioma en el que Podemos basa la propuesta económica que esta tarde ha presentado en Madrid su secretario general, Pablo Iglesias, acompañado por dos economistas que han elaborado el documento, María Pazos y Bibiana Medialdea.

El texto quiere ser un eje estratégico para lograr la recuperación económica y postula que el actual sistema de cuidados a menores y dependientes recae en la figura femenina. "Es obsoleto, insuficiente, injusto e insostenible", aduce Podemos, que subraya que un cambio de modelo solventaría también el problema de la economía sumergida, tan asociada al mundo de los cuidados. "No es una manera de salvar el expediente en la semana del 8 de marzo [día internacional de la mujer trabajadora] sino la apuesta seria de gobernar de otra manera", ha explicado Iglesias.

El documento propone una batería de medidas para que "la mujer no tenga que elegir entre maternidad y trabajo de calidad", dilema generado por "un sistema patriarcal". Entre las propuestas destaca la introducción de "prestaciones universales por criatura, independientes de la renta y el tipo de familia", una suerte de 'paga-bebé' periódica inspirada en la que estableció Suecia tras la segunda guerra mundial. Podemos considera que este método no introduce "incentivos perversos en el mercado laboral" y que permite que todos los bebés sean atendidos "por igual" porque los padres pasan a ser "simples administradores".

Las responsables del documento niegan que su propuesta sea similar al cheque-bebé instaurado por José Luis Rodríguez Zapatero en su primera legislatura y que desapareció en las primeras oleadas de la crisis puesto que en aquel caso era una única paga y la propuesta consiste en una cuantía periódica.

Podemos, que inspira su modelo en las sociedades nórdicas, y propone también establecer prestaciones a las familias monoparentales, que recibirían además una atención especial en los servicios públicos.

PERMISOS IGUALES

Para facilitar que hombres y mujeres tengan de facto las mismas oportunidades en el terreno laboral, el partido exige una reforma de los permisos por nacimiento o adopción, en los que se aumente de forma paulatina el permiso de paternidad --establecido actualmente en 15 días-- para equipararlo con el de las madres --que disponen de 4 meses--. En este sentido, el proyecto es que el permiso de nacimiento sea "igual para cada persona progenitora, independientemente de su sexo, orientación sexual o tipo de familia". Como vienen demandando los especialistas en este ámbito, Podemos apuesta por un permiso intransferible para evitar que los padres cedan a las madres sus días y sigan siendo ellas las cuidadoras, también exige una baja financiada al 100%, con la intención de evitar que las familias con menos recursos no puedan asumirla.

SIN PAGA

El documento presentado critica con dureza la actual ley de dependencia y propone la eliminación de las ayudas que reciben las personas cuidadoras, puesto que considera que a largo plazo fomenta que la mujer siga encerrada en casa por un pequeño sueldo y no se incorpore al mercado laboral.

También propone la implantación de guarderías públicas gratuitas desde el nacimiento del bebé, eliminar los incentivos a tiempo parcial y establecer una jornada laboral máxima de 35 horas semanales para favorecer la conciliación, a pesar de que el documento se ha presentado a las siete y media de la tarde.

Con estas medidas Podemos quiere atajar el problema de la economía sumergida, que cifra entorno al 20% del PIB y que "cercena los derechos de parte importante de la población".

Para argumentar sus propuestas, Podemos arguye que la inversión que España destina a los cuidados de larga duración es apenas el 0,6% del PIB, frente al 3,8% invertido en Holanda o el 3,7% de Suecia. Según el partido lila, la escasez de recursos públicos y de políticas de igualdad y apoyo a la natalidad contribuyen a que las mujeres carguen casi en exclusiva con los cuidados de menores y dependientes, lo que implica a medio plazo una prevaricación de las carreras laborales de las mujeres.