Mas de 260 autocares desde toda España se han desplazado a Madrid llenos de simpatizantes de Podemos para secundar hoy la "marcha del cambio" convocada por el partido de Pablo Iglesias, que confía en que miles de personas secunden la convocatoria para decirle al Gobierno que empieza su "cuenta atrás".

Ese es el objetivo de la movilización que, en palabras del propio Iglesias, "no es para pedirle nada al Gobierno o a la oposición, sino para simbolizar y encarnar que el cambio es ahora".

Podemos ha invitado a participar en la marcha a todos los ciudadanos, también a militantes y votantes de otros partidos, incluidos PP y PSOE, porque no pretenden que esta movilización sea la de un partido político.

"El cambio político no va a traerlo Podemos, sino la gente de nuestro país. La Marcha del Cambio no es una marcha de Podemos, sino de todas las personas que queremos recuperar la dignidad y ayudar al cambio en nuestro país", dice el secretario General de Podemos, Pablo Iglesias en una carta que ha remitido a todos los inscritos de su partido llamándoles a participar.

Su pretensión, en definitiva es decirle al Gobierno de Mariano Rajoy que se va a ir y que el cambio empieza "ahora".

Para conseguirlo han empeñado todo su esfuerzo, han fletado autobuses y muchos de los simpatizantes han ofrecido sus casas para acoger a quienes no tienen recursos para alojarse en Madrid y que hoy puedan asistir a la marcha convocada a las 12 y con un recorrido desde la Plaza de Cibeles hasta la Puerta del Sol.

Allí se ha instalado un escenario en el que está previsto que Pablo Iglesias se dirija a los asistentes. El acto se cerrará con la intervención del número tres del partido, Juan Carlos Monedero.