La comisión permanente de la ejecutiva del PSOE decidirá formalmente hoy el voto en contra del grupo parlamentario a los objetivos de déficit y deuda pública que acompañarán el techo de gasto del 2018, según confirmaron ayer fuentes socialistas.

Dos semanas después del 39 Congreso, el reelegido secretario general Pedro Sánchez volverá así a diferenciar al nuevo PSOE del apoyo al Gobierno que dio hace seis meses la gestora que tomó la riendas del partido tras su dimisión.

Fue el pasado diciembre, cuando en plena guerra interna en el PSOE la gestora pactó con el Ejecutivo de Rajoy una subida del 8% del salario mínimo y una décima más de margen de déficit para las comunidades autónomas de lo inicialmente estipulado, a cambio de su apoyo al techo de gasto del Estado, los objetivos de déficit y un conjunto de medidas fiscales con las que cuadrar las cuentas del 2017.

El acuerdo fue cerrado sin conocimiento de UGT y CCOO, que en ese momento se encontraban en la mesa de diálogo social y que lo consideraron una «puñalada» a sus negociaciones.

Además, permitió a Podemos proclamar el «principio de la gran coalición» entre el PP, el PSOE y Cs.

Seis meses después, el PSOE de Pedro Sánchez no solo exhibe una buena sintonía con los sindicatos, sino que, entre la abstención y el voto en contra, optará por oponerse claramente a los objetivos de estabilidad del PP en su afán de proyectarse como la alternativa de izquierdas del país.

Lo hará, igual que actuó el pasado lunes con su «abstención razonada» al Tratado de Libre Comercio de la Unión Europea y Canadá (CETA), ofreciendo una «explicación muy detallada, motivada y estudiada» de su nuevo gurú económico, Manuel Escudero, tras los análisis «muy serios, rigurosos y con datos comparativos» que han hecho los expertos del partido, avanzó el pasado viernes la portavoz parlamentaria, Margarita Robles.

ofensiva contra montoro / La ofensiva del PSOE contra el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, reprobado la pasada semana por el pleno del Congreso a instancias del grupo socialista por la amnistía fiscal inconstitucional que hizo en el 2012, rema en esa misma dirección de oposición frontal al PP.

Ya el pasado jueves las comunidades autónomas socialistas rechazaron en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) las nuevas metas de déficit, «un elemento muy relevante a tener en cuenta», en palabras de Robles.

La posición del PSOE volverá a dejar en manos de la abstención del diputado de Nueva Canarias Pedro Quevedo el desbloqueo de la política económica de Rajoy en el pleno previsto para el 11 de julio.

El techo de gasto se incluye en el acuerdo de Gobierno que contempla los objetivos de estabilidad presupuestaria y deuda pública para el trienio 2018-2020. El Gobierno ha dado a entender que habrá un pequeño margen para subir el gasto el año que viene, pero también advirtió de que nadie espere «grandes revoluciones».

El límite del gasto no financiero del 2017 se situó en 118.337 millones de euros, un 4% inferior al inicialmente aprobado para el 2016.