El Gobierno ha cambiado de criterio sobre las consecuencias de la convocatoria por parte de Carles Puigdemont de unas elecciones autonómicas, pero el PSOE no. Mientras el Ejecutivo central sostiene, en contra de lo mantenido hasta ahora, que unos comicios catalanes al uso, no constituyentes y sin declaración unilateral de independencia (DUI), no paralizarían la aplicación del 155 de la Constitución para intervenir el Govern y “volver a la legalidad”, los socialistas insisten en que, si se dan todas estas condiciones, la puesta en práctica de la iniciativa recogida en la Carta Magna, que en principio aprobará este viernes el Senado, debería quedar detenida. “Nuestra posición es clara”, señalan fuentes de la dirección del partido liderado por Pedro Sánchez.

La nueva versión del Gobierno, que hasta el lunes veía en las elecciones una alternativa al 155, supone la primera diferencia relevante entre el PP y el PSOE sobre la respuesta a dar a la crisis territorial. Los socialistas llevan días insistiendo en la necesidad de que Puigdemont convoque elecciones. Así se lo trasladó el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, a Puigdemont durante la reunión que mantuvieron el viernes. Este lunes, tras la reunión de la ejecutiva, el portavoz del PSOE, Óscar Puente, volvió a insistir en los comicios frente al 155, siempre que no haya declaración de independencia. “Una declaración de independencia es inaceptable. Ni ‘light’, ni ‘soft’, ni verbal, ni escrita sirve para volver a la legalidad”, dijo Puente.

Pesimismo creciente

Los socialistas evitan entrar a juzgar los motivos del cambio de criterio por parte del Ejecutivo central. “Nosotros no somos el Gobierno”, insisten. Tampoco quieren entrar a especular qué efectos tendría sobre su apoyo al 155 si Puigdemont decide convocar elecciones esta semana, antes del pleno del Senado del viernes, y Mariano Rajoy contesta que la suspensión de competencias autonómicas y destitución del Govern sigue adelante. Entre otras razones, porque son pesimistas sobre la voluntad del aún ‘president’ de ir a unos comicios ortodoxos.

En el PSC, mientras tanto, no quieren dar excesiva importancia a este mensaje del Gobierno. Sus dirigentes confían en que sea una posición solo temporal. Fuentes de la dirección de los socialistas catalanes subrayan que el Gobierno puede volver a cambiar de posición, llegado el caso. “Esto es lo que dice el Gobierno hoy. Pero hay que ver qué dice mañana, pasado y al otro”, concluyen.