Hasta el momento, la posición oficial de Rusia respecto al conflicto en Cataluña consistía en apoyar sin medias tintas la integridad territorial de España. Sin embargo, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha modificado esta postura al asegurar que el conflicto con los separatistas , tanto en Cataluña como en el Kurdistán, son consecuencia del "doble rasero" de los países occidentales.

"Resulta que para algunos de nuestros colegas hay luchadores buenos por la libertad y hay separatistas que no pueden defender sus intereses ni con la ayuda de mecanismos democráticos", ha recordado en un discurso en el Foro Valdai, donde congrega a pensadores y líderes de opinión de múltiples países afines a las políticas del Kremlin.

Desintegración de la URSS

En una aparente referencia a la desintegración de la URSS y la exYugoslavia, Putin recordó que "en su tiempo", la UE y una serie de países, saludaron la desintegración de unos estados, sin ocultar su alegría".