Mariano Rajoy declarará el miércoles en la Audiencia Nacional como testigo en el juicio por la primera época de la trama Gürtel (1999-2005) en relación a la contratación de empresas de Francisco Correa en las campañas electorales de 2003 de dos municipios madrileños. Será la primera vez en la historia de la democracia española en la que un presidente del Gobierno en activo se sienta ante un tribunal. Pero pese a este dato y pese al daño por la imagen de un jefe del Ejecutivo en todos los medios de comunicación entrando a declarar por el principal caso de corrupción que ha afectado al PP hasta ahora, el político gallego espera ese momento con "tranquilidad". "Hacía tiempo que no lo veía tan tranquilo", ha llegado a decir este lunes el coordinador del partido, Fernando Martínez Maillo.

El presidente lleva días preparando ese momento con sus equipos de la Moncloa y de Génova, según fuentes de la dirección popular. Muchas horas estudiando los estatutos del partido de aquellos años en los que Rajoy era vicesecretario general. Ante las preguntas que se espera y que se ha preparado, un argumento: él no tenía "nada" que ver con las campañas de los municipios investigados, Pozuelo y Majadahonda, porque no era su tarea estar pendiente de esos gastos, como señalan los estatutos. Además recordará, como así ha hecho Maillo, que el empresario Correa dejó de ser contratado por el PP en el 2004, el año en el que Rajoy ascendió a la presidencia del partido.

EL ‘MINUTO DE GLORIA’ DE LOS ABOGADOS

El PP cree que la declaración será corta y que solo planteará cuestiones a Rajoy el representante de la Asociación de Abogados Demócratas por Europa (Adade), que ejerce la acusación popular y es la que pidió la declaración del líder de los conservadores. Espera que el resto de abogados que representan a los 34 imputados en el juicio no tomen la palabra a no ser que quieran tener un "minuto de gloria". En este sentido, Maillo ha destacado la relación entre Adade y el PSOE. "Todo el mundo sabe que son miembros del PSOE y que actúan al dictado del PSOE", se ha quejado.

El espíritu con el que el presidente del Gobierno prepara este asunto es el de "colaborar" y actuar con "absoluta normalidad", ya que sabe, reconocen fuentes del PP, que no puede actuar como hizo en su día la infanta Cristina y decir que no se acuerda de nada.

OTROS CASOS

En Génova, además, han querido reforzar esa "normalidad" recordando que otros políticos también han tenido que comparecer ante los tribunales. Maillo ha señalado los casos del británico David Cameron, el francés Lionel Jospin y la chilena Michel Bachelet.