Casi 14 años después, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha reunido con los representantes de la Asociación de Víctimas del Yak-42, en el que fallecieron 62 militares españoles que regresaban de una misión en Afganistán. La reunión se ha celebrado en la Moncloa, ha durado hora y media, y ha discurrido en un clima "amable", "sin tensiones" ni "malas caras", según el relato de los afectados. Rajoy, que ha estado acompañado de la ministra de Defensa, Dolores de Cospedal, se ha comprometido a buscar cómo satisfacer su principal petición: que el Estado les proporcione una reparación "moral y jurídica", después de años peleándose por buscar "la verdad y la justicia" en los tribunales.

Rajoy no les ha pedido perdón "explícitamente", tampoco se lo han exigido los familiares, según han contado al término del encuentro, pero el colectivo considera que el hecho de que el que fuera vicepresidente cuando ocurrió la tragedia, tantos años después se haya comprometido a "hacer las cosas bien", "es una forma de perdir perdón".

El propio presidente ha señalado que el encuentro ha sido "franco y cordial", y él ha compartido "lo que le han dicho y los sentimientos" de las víctimas. "Espero que seamos capaces de hacer las cosas bien", ha añadido en declaraciones a la prensa.

LA RESOLUCIÓN

Las familias, que han pedido a Defensa los 32 contratos anteriores a los del Yak, esperan que ahora Defensa elabore una resolución que asuma el dictamen del Consejo de Estado que responsabilizó del accidente al Ministerio, al frente del cual estaba Federico Trillo. Asimismo, reclaman que la asunción de la responsabilidad en lo sucedido "emerja" del reconocimiento de que el departamento, que subcontrataba a compañías sin garantías el traslado de los militares, no ejerció una vigilancia correcta, es decir, funcionó de manera "anormal".

Cospedal, que se reunió con las familiares justo después de que el informe del Consejo viera la luz, ya se habiá comprometido a investigar la gestión del accidente y asumió en términos generales el dictámen del órgano consultivo. Asimismo, en una comparecencia en elCongreso el pasado 16 de enero, pidió "perdón en nombre del Estado" por el hecho de que el ministerio no hubiera reconocido con anterioridad su responsabilidad en el siniestro.

Pero, según los afectados, falta por ver en "qué grado" asume el informe, si apoya solo sus conclusiones o el "relato fáctico" que indica que había un funcionamiento "anormal" en el ministerio. Según ha explicado el abogado de la asociación, Leopoldo Gai, el asunto es "díficil y delicado" porque significaría, en última instancia, el reconocimiento de que no se trató de un "accidente" sino consecuencia de que volaban en una "chatarra", término usado por el padre de uno de los fallecidos, que ha recordado que además se "ultrajaron sus cuerpos".

Fuentes de Defensa han explicado por su parte que el Gobierno quiere incluir en la resolución todos los contratos y que se hagan las cosas "bien", si bien asumen que es díficil encontrar los documentos que hagan referencia a todas las subcontratas.

En cualquier caso, la ministra se ha comprometido en la reunión de este martes a presentar en primer lugar a las familias su dictamen y para los afectados esto síntoma de su "voluntad de diálogo". Si el informe recoje todas sus demandas, explican, esto es suficiente "homenaje", no necesitarían más, han señalado.

LA DIMISIÓN DE TRILLO

El dictamen del Consejo de Estado provocó que se acelerara la salida de Trillo como embajador en Londres. Las familias han reclamado este martes a Rajoy que impida que se reincorpore a su plaza de letrado, precisamente en el órgano consultivo pero, según su versión, el presidente no se ha comprometido a parar su vuelta.

Públicamente, Rajoy ya ha defendido que Trillo, como "funcionario", regrese a su primer destino, y ha manifestado que suscribe "todas y cada una de las afirmaciones" de Cospedal en torno al perdón a las víctimas. Este miércoles tendrá una nueva oportunidad, ante la pregunta que le formulará el PSOE en la sesión de control del Congreso.

EL TÍTULO DE HIJO ADOPTIVO

Mientras, el pleno del Ayuntamiento de Alcoi (Alicante) iniciará los trámites para retirar el título de Hijo Adoptivo a Trillo, título que ostentaba desde el 31 de marzo del 2000, cuando era alcalde el socialista Josep Sanus. El trámite se iniciará con la aprobación de una declaración institucional que este lunes por la tarde se lleva a pleno y que firman los grupos municipales del PSPV, Compromís y Guanyar Alcoi.

El texto pide iniciar "los trámites pertinentes para la retirada del título de Hijo Adoptivo de la ciudad de Alcoi al señor Federico Trillo-Figueroa Martínez Conde". Este es el segundo intento del consistorio de retirar los honores a Trillo. En el pleno del 22 de julio del 2013 ya lo trataron de conseguir el PSPV, Compromís y Esquerra Unida-Entesa.

Sin embargo, el Reglamento Especial de Honores y Distinciones del Ayuntamiento, aprobado en 1976, "no permite la retirada de las distinciones concedidas". La única excepción (y a esto es a lo que se acogen los tres grupos en la actualidad) es "conseguir los necesarios dos tercios de los votos del pleno en el Ayuntamiento para retirar la distinción". PSPV, Guanyar Alcoi y Compromís suman 16 de los 24 representantes; es decir, dos terceras partes de los votos, con independencia del sentido del voto de PP y Ciudadanos, los otros dos grupos con representación municipal.

Trillo y Sanus mantenían una buena relación profesional. Además, el exministro de Defensa ha participado en las fiestas de Moros y Cristianos con la Filà Mozárabes.