En unas palabras distintas a las que venía empleando hasta el momento sobre la respuesta frente al referéndum unilateral del 1-O, Pedro Sánchez ha criticado este martes José Manuel Maza, fiscal general del Estado. El pasado lunes, Maza abrió la puerta a la detención del ‘president’ de la Generalitat, Carles Puigdemont, por malversación de fondos públicos. “Después de ver lo que ha ocurrido en los últimos días, habrá que preguntarse de qué sirve un Gobierno que delega sus funciones en los tribunales. Los jueces y los fiscales cumplen con su deber, pero esta crisis solo tendrá solución si los políticos cumplen también con su deber. Por tanto, el primer mensaje es el de mesura. Hay que recordar al Gobierno de España que la prudencia es buena para todos, incluido el fiscal general del Estado”, ha dicho el secretario general del PSOE durante una intervención ante diputados y senadores.

Sánchez había evitado en las últimas semanas la crítica a la respuesta del Estado frente a la convocatoria independentista, pero su partido, aunque evitó atacarla en público, tampoco compartió la orden de Maza de investigar a los 712 alcaldes que cederán locales para la consulta. Esta vez, en cambio, ha puesto el acento en el PP y su política de “confrontación territorial” como forma de “ganar elecciones”.

En todo caso, el líder socialista, que ha recordado el recurso de los conservadores contra el Estatut y lo mucho que ha aumentado el independentismo catalán durante los gobiernos de Mariano Rajoy, ha argumentado que esta actitud del PP “no puede justificar lo que ha hecho el independentismo”.

LA FECHA: EL 4 DE OCTUBRE

Sánchez teme que el Govern acabe aprobando una declaración unilateral de independencia y considera que Podemos está colaborando para que este drástico gesto se lleve a cabo. Los morados cargan en esta crisis casi exclusivamente contra el PP, no contra el independentismo catalán, y consideran que el 1-O es una “movilización legítima”. El líder socialista ha puesto incluso fecha a esa hipotética declaración: el próximo 4 de octubre. “Quiero hacer una petición a Unidos Podemos y los comunes: que tengan cuidado, no vaya a ser que la posición que están manteniendo con el 1-0 sirva de coartada al independentismo para hacer una declaración unilateral de independencia el próximo 4 de octubre en el Parlament”, ha dicho.

Frente a estas posiciones a su izquierda y su derecha, Sánchez ha reivindicado la actitud del PSOE, que ha conseguido que el Congreso apruebe una comisión territorial para estudiar el encaje de Cataluña. El jefe de la oposición, en un discurso muy duro, ha criticado a todos los actores en esta crisis. También a Ciudadanos, que la semana pasada intentó sin éxito que el Congreso aprobara una declaración en defensa del Estado. Los socialistas, al no lograr que el escrito incluyera también la mención a una “salida pactada y legal”, votaron en contra. La iniciativa fue rechazada.

“Han sobrado amenazas y ha faltado diálogo. Ahora que estamos viendo esta dialéctica de frentes, hay que recordar la posición del PSOE. Hace una semana vimos una proposición oportunista de un grupo parlamentario que quería entrar en bloques. Esa dialéctica de bloques es lo que no ha traído también a esta situación. Nosotros no vamos a entrar en algún tipo de bloque. Ni tampoco vamos a decir que vamos a aislar al Gobierno actual para intentar no sé qué. España se construye desde el diálogo. Tenemos que estar todos, incluidos los extremos políticos. Por eso cuando proponemos la comisión parlamentaria lo que hacemos es romper la dinámica de bloques”, ha señalado.

EL "RETROCESO DE LA DEMOCRACIA"

Sánchez también se ha detenido en el Govern. “Lo que ha pasado en los últimos meses no es el avance del independentismo; es el retroceso de la democracia, singularmente en la institucionalidad catalana. El referéndum no cuenta con garantías ni con el amparo de la ley internacional. Por eso también hoy, aquí, en el Senado, me gustaría trasladar al Govern nuestra petición de que reflexione. Esta huida hacia adelante solo va a traer fractura en la sociedad catalana. En esta crisis no puede haber ganadores y perdedores”, ha concluido.