El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que el Ejecutivo aprobará un proyecto de ley contra el fraude fiscal. En esa norma se incluirá la prohibición de furturas amnistías fiscales. Consciente de que se contradice con lo que propugnaba desde la oposición, Sánchez ha afirmado que la "irretroactividad" que el Tribunal Constitucional impuso en el perdón fiscal aprobado por el anterior Gobierno de Mariano Rajoy, ha insistido en que el objetivo es ahora que no se aprueben normas como esta en adelante.

Según el jefe del Ejectivo su plan forma parte de un objetivo destinado a defender la "justicia social". Ha recordado que fue el PSOE el que en su día impugnó la amnistía fiscal, con la que el anterior Gobierno "ni siquiera recaudó la mitad de lo previsto". El varapalo propinado por el Tribunal Constitucional fue el que, a su vez, declaró la "irretroactividad", que afecta a "la publicación de los nombre de quienes se acogieron a la amnistía fiscal".

EXPLOTACIÓN LABORAL

Dentro de las actuaciones en el ámbito económico, Sánchez ha anunciado asimismo que el Ejecutivo aprobará "un plan director contra la explotación laboral" antes de que finalice este mes. Todo ello se compatibilizará con planes de choque que persiguen atajar el fraude laboral y el abuso de figuras como la de los falsos autónomos. También se llevará a cabo un plan contra el desempleo juvenil, en el que se incuirán los contratos de relevo y de prácticas y se eliminarán las prácticas extracurriculares.

En materia de vivienda ha anunciado una reforma que elevará el periodo mínimo de los contratos de alquiler de los tres años actuales a cinco. A su vez se trabajará para que los alquileres turísticos de la ley de arrendamientos urbanos (LAU).

El jefe del Ejecutivo ha asegurado también que se potenciará el autoconsumo energético y se ha comprometido a asegurar que las pensiones se actualicen conforme al coste de la vida (IPC). En este contexto ha tendido la mano para constituir un nuevo pacto de Toledo para las prestaciones públicas.

UNA PAC "FUERTE" QUE DEFINE COMO "UNA CUESTIÓN DE ESTADO"

Por otra parte, Sánchez, ha definido hoy como "cuestión de Estado" la negociación de la Política Agraria Común (PAC), un asunto para el que espera seguir sumando consensos dentro y fuera de España con el objetivo de lograr una PAC fuerte y con un presupuesto "acorde a los nuevos retos". Sánchez ha defendido que la PAC debe responder a nuevos retos como el cambio climático y la preservación del medio ambiente.

El presidente ha recordado que el Ejecutivo ha recabado ya el apoyo de "los principales representantes del sector" para ese fin y espera "poder ampliar estos consensos" con otros países miembros y en el Europarlamento.

Por ahora, la primera propuesta de la Comisión Europea, conocida hace unos meses, plantea rebajar un 5 % los fondos de la Política Agrícola Común y un 4 % las ayudas directas.

"Necesitamos contar con una política potente para mantener y desarrollar un medio rural que ofrezca oportunidades a jóvenes y mujeres", ha apuntado Sánchez.

A su juicio, frenar la "enfermedad silenciosa de la despoblación" que afecta a gran parte del territorio rural español está directamente relacionado con esta cuestión, pues "una agricultura con futuro implica una España rural con futuro", ha subrayado.

Además, el presidente ha querido recalcar en la Cámara el apoyo del Gobierno a los productores españoles de aceituna negra de mesa afectados por las medidas proteccionistas del Gobierno de Estados Unidos.

Ayer, en Bruselas, el comisario europeo de Agricultura, Phil Hogan, avanzó que "pondrá los recursos financieros a disposición de los productores de aceituna negra de mesa" si Estados Unidos finalmente impone aranceles del 34,75 % a sus importaciones desde España, una decisión que se conocerá la próxima semana.