La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha vuelto a Catalunya para tratar de revertir los malos pronósticos que avecinan las encuestas al PPC el próximo 21 de diciembre. Siguiendo su estrategia en estos comicios, se ha vanagloriado de haber intervenido la Generalitat con la aplicación del 155 y ha defendido que este "ha puesto fin a los desmanes, al incumplimiento de la ley, a la falta de neutralidad y al ninguneo de más de la mitad de catalanes". Pero esta vez Santamaría no ha guardado los habituales formalismos y ha espetado que gracias a su actuación al frente del Ejecutivo han conseguido que "ERC y Junts per Catalunya no tengan líderes porque están descabezados".

En una comida mitin con simpatizantes en Girona, ha sacado pecho especialmente de haber cerrado las ‘embajadas’ de la Generalitat, y ha rebautizado el Diplocat: "Ahora se llama Diplocat en liquidación", ha sonreído. Y ha proseguido: "¿Quién se merece los votos para seguir liquidando el independentismo? Mariano Rajoy y el PP".

Para la dirigente popular la aplicación del artículo de la Constitución ha permitido "sacar" de la Generalitat a los que "pretendían llevar a Catalunya a la ruina" y ha conllevado que ahora los empelados públicos "cumplan todos los días con la ley".

"¿Saben cuál es el programa del independentismo?", se ha vuelto a cuestionar. "La agenda negra, la Moleskine de Jové: mentir a todo el mundo, incumplir con los que les creyeron y triturar la libertad de todos los catalanes", ha rematado, ovacionada por los asistentes. "Les hemos puesto freno pero ahora hay que conseguir asentar lo que hemos hecho las últimas semanas", ha animado la vicepresidenta.

"Un Govern de dictadura"

El candidato popular, Xavier García Albiol, ha felicitado al Gobierno por cerrar las ‘embajadas’ de la Generalitat, de clausurar el Diplocat, y de haber convocado 2.000 plazas de profesores."Esos millones de euros que nos estamos ahorrando del ‘procés’ está sirviendo para poderlos destinar a lo que de verdad importa a los catalanes que no es la independencia sino la dependencia", ha reivindicado. No sin críticas a Puigdemont, a quien ha acusado de "convertir en invisibles" a los catalanes que "no se sentían identificados con el proceso independentista".

Desde su ciudad natal, el delegado del Gobierno, Enric Millo, ha asegurado que, mientras los dirigentes del PP son demócratas por "frenar la pesadilla" del ‘procés’ y por "no someter la ley al capricho de los gobernantes", los independentistas son "tiranos" por "querer imponer sus ideas" en estos últimos dos años. "Han mentido y han menospreciado la ley", ha lamentado, y ha sentenciado que en Catalunya ha habido "un Govern de dictadura". Ante esto, ha alzado a los conservadores como el "verdadero obstáculo" a los secesionistas.

En Girona, los populares se disputan perder su único escaño, fruto de los 22.572 votos que obtuvieron en el 27-S. Millo ha recordado, como ya avanzaron en diferentes ‘spots’, que un diputado más del PP “resta” una butaca a ERC o a la CUP en el hemiciclo catalán. "Puede parecer una maniobra de despiste", ha señalado Albiol, pero ha apostillado que esta provincia "se merece tener un diputado del PP".