Un autobús urbano perdió hoy el control en el barrio del Carmel de Barcelona y provocó dos muertos y once heridos, ocho de ellos leves. Los dos fallecidos son una niña de diez años y una mujer de 36 que murieron atropelladas por el vehículo cuando éste se salió de la calzada y chocó contra un poste y un edificio. Los hechos ocurrieron a las 11.50 horas a la altura del número 143 de la calle Dante. Los testigos aseguraron que una discusión con un hombre que había aparcado mal una furgoneta momentos antes pudieron provocar los "nervios" del conductor de la línea y la salida de la calzada.

A las 11.50 horas de la mañana un autobús de la línea 87 de la empresa Authosa se salió de la vía y acabó subido a la acera después de chocar con un poste y un edificio, por causas que se desconocen, en el barrio barcelonés de El Carmel. A parte de las dos personas fallecidas, otras 11 personas resultaron heridas, ocho de ellas leves, y fueron ingresadas en los hospitales Sant Pau y Vall d'Hebron para ser sometidas a pruebas médicas.

El autobús se disponía a tomar una curva cuando perdió el control y atropelló a la pequeña tras impactar con una puerta de un garaje y provocar varios heridos. Al conductor le fue practicada la prueba de alcoholemia, aunque dio negativo. Un testigo aseguró ser "amigo" del conductor, del que destacó que es un "buen profesional, agradable, no bebe, ni busca problemas".

Entre los heridos, se encuentra un bebé de dos meses y varios afectados por crisis nerviosas o de ansiedad. El resto, tres mujeres de entre 52 y 65 años, se encontraban hoy en observación con "contusiones y algunas fracturas". Las dos víctimas mortales son una niña de 10 años que ingresó en el hospital con parada cardiorrespiratoria y una mujer de 36 que llegó ya cadáver al Hospital Sant Pau.

GRITOS DESESPERADOS

Los heridos del accidente gritaban "con gran dolor y desesperación" mientras la sangre "corría" por la calle según explicó José, uno de los vecinos del barrio y testigo del accidente. Se encontraba en el quiosco que regenta en la calle Pantá de Tremp cuando se produjo el suceso. Según sus declaraciones, había "una furgoneta blanca mal aparcada" y como el autobús no podía pasar tuvo que hacer una "mala maniobra" que terminó "arrastrando a las personas" que estaban en la acera. Otra de las vecinas, Margarita, declaró que escuchó "un estruendo enorme" y que cuando se asomó a la ventana vio al autobús empotrado en el edificio de enfrente, al tiempo que no dejaban de oírse "gritos de histeria".

Otra de las vecinas, Angeles, relató que antes de que el autobús perdiese el control el conductor de la furgoneta y el de la línea "discutieron" porque la furgoneta no permitía pasar al autocar al estar mal aparcada mientras descargaba paquetes.