Antonio Banderas ha reaparecido este domingo en la alfombra roja de la Gala Starlite, el evento benéfico que organiza el actor en Marbella. En su octava edición, ha reunido a decenas de rostros famosos con el objetivo de convertir el glamur y el lujo en solidaridad. El intérprete malagueño se ha mostrado enérgico y totalmente recuperado en su Málaga natal siete meses después de sufrir dos cirugías por un ataque al corazón.

Los organizadores del evento solidario cifran en más de 2,2 millones de euros el dinero recaudado hasta ahora. Es por ello por lo que Banderas ha destacado la importancia de esta cita para tratar de aportar "un grano de arena" a la hora de ayudar a los menos favorecidos y ha recordado que todos los fondos se destinan "inmediatamente" a causas sociales. La modelo argentina Valeria Mazza y el humorista Carlos Latre han presentado un año más la gala, que ha contado con las actuaciones del cantante argentino Coti y de Niña Pastori.

La gala, promovida por Banderas y la empresaria Sandra García-Sanjuán, ha reconocido con los premios Starlite la labor solidaria del cantante Miguel Poveda, la bailaora Sara Baras, la actriz Loles León, el entrenador del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone, y el chef marbellí Dani García. Por la alfombra roja han desfilado, entre otros, las cantantes Marta Sánchez, Mónica Naranjo y Nuria Fergó, así como las actrices Ana Obregón, Ana Fernández, Cristina Castaño y Vanesa Romero. Al acto benéfico han asistido además las presentadoras Mariló Montero, Arantxa de Benito, Alejandra Prat, Ana García Lozano y Elsa Anka, el presentador Agustín Bravo y las modelos Mireia Lalaguna y Estefanía Luyk.

Los organizadores agotaron rápidamente las 400 entradas puestas a la venta para asistir a la velada, cuyo precio del cubierto oscilaba entre los 500 y los 1.000 euros. La recaudación de la gala, como cada año, estará destinada a las fundaciones Niños en Alegría, que impulsa la empresaria García-Sanjuán, y a Lágrimas y Favores, que promueve Antonio Banderas y que reparte sus fondos entre Cudeca, Cáritas, la Universidad de Málaga y la Fundación Corinto.