En un plató de televisión y en directo junto con su profesor para promocionar el ensayo filosófico que han escrito juntos. La hija de Carolina de Mónaco, Carlota Casiraghi, de 31 años, participó hace unos días en Clique Dimanche, un programa de la televisión francesa justo cuando trascendió la noticia sobre su inminente boda con el productor de cine Dimitri Rassam, el hijo de la actriz Carole Bouquet.

Se trataba de presentar su primer libro, titulado Archipiélago de pasiones, un tratado de filosofía que ha escrito con el que fue su profesor en esta materia durante sus años en el instituto François Couperin de Fontainebleau, Robert Maggiori. Según este, Carlota fue la mejor alumna que tuvo en sus clases.

El libro son más 300 páginas sobre los distintos estados de ánimo por los que puede atravesar una persona en diferentes momentos y situaciones de su vida. Por cierto, que está dedicado a la memoria de Stéfano Casiraghi, padre de Carlota, fallecido trágicamente a los 30 años de edad en 1990 mientras navegaba en una lancha motora en aguas del principado de Mónaco. Ella, nacida el 3 de agosto de 1986, tenía entonces cuatro años. Su hermano mayor, Andrea, dos más, y su hermano menor, Pierre, uno menos. Los tres nacieron entre junio de 1984 y septiembre de 1987.

Durante los 50 minutos que duró el programa, Carlota Casiraghi pudo departir como filósofa sobre temas tan dispares como la violencia sexista, los estereotipos y el uso, abuso y hasta censura que afecta a las redes sociales. El presentador le preguntó si también a ella, por pertenecer a la familia Grimaldi, le habían afectado los estereotipos y había sido objeto de burlas y comentarios en las redes. «Por supuesto que sí», aunque le quitó hierro al asunto. Tampoco se mostró partidaria de exhibir su vida en las redes sociales.

«Lo que queremos enseñar con este libro es que la emoción sienta cátedra, que podemos tener miedo, ataques de ira, pero necesitamos algo por encima de nosotros a lo que agarrarnos. En definitiva, tenemos que poner especial atención porque el afecto hace que confundamos la cólera con el odio o el miedo; en definitiva, todo es susceptible de ser intercambiado y al mismo tiempo, el afecto puede enmascarar concepciones que puede ser que debamos sacar a la luz en lugar de ocultarlas bajo un cascarón. Necesitamos tener una visión de nuestras emociones lo más clara posible», indicó Carlota Casiraghi.

También hubo espacio para discutir sobre el amor. Concretamente, sobre el amor tóxico, la clase de amor que se utiliza como arma en una pareja para herir el autoestima del otro. En este punto, Carlota precisó: «Eso no merece el nombre de amor. Amor es la compatibilidad con la otra persona»», añadió Carlota.

Según ha trascendido en los últimos días, aunque todavía no hay nada oficial, Carlota Casiraghi y Dimitri Rassam contraerán matrimonio este mismo verano. Madre de un niño de 4 años llamado Rapahel, fruto de su relación con el actor francés Gad Elmaleh, esta será la primera vez que Carlota pase por el altar. Dimitri Rassam, por su parte, contrajo matrimonio en San Petersburgo con la modelo rusa Masha Novoselova, con la que en el 2011 tuvo una niña llamada Daria.