La vida de Jeremy Meeks, considerado el expreso más guapo del mundo desde que se publicara su ficha policial, ha dado un vuelco. Tal fue su magnetismo que, desde el primer minuto, las redes sociales cayeron rendidas a sus pies pidiendo su liberación a golpe del hashtag #FreeJeremyMeeks y haciendo donativos.
Logró cambiar las esposas y el mono naranja por prendas de última tendencia, como en la pasarela de Philllip Plein, tras fichar como modelo por White Cross Management, o por el esmoquin para acudir al Festival de Cannes. Lugar donde, dicen, conquistó el corazón de la heredera de Topshop, Chloe Green. El exreo todavía seguía casado con Melissa, con quien tenía un niño, y de la que se divorció el pasado octubre. Pero nada, ni que la familia de ella no aceptara esta relación, ni su historial delictivo, ha hecho que la pareja se tambalee. Al contrario. Según ha publicado US Weekly, la pareja ha decidido dar un paso más y están esperando su primer hijo. Además, la relación con la familia de Chloe ha mejorado y su suegra ya ha posado con él.
