Emmanuel Macron, el presidente de Francia, ha decidido apostar por trajes hechos en Francia. Según la revista 'Closer', ha cambiado de sastre para vestir su ropa en la casa Smuggler, que pasa por ser el único modisto en París cuyos trajes son fabricados en Francia, en la localidad de Limoges.

El responsable de la marca, Gilles Attaf, ha revelado a la revista que fue el gabinete de la esposa del mandatario, Brigitte Macron, quien contactó con ellos en primer lugar, aunque después el gabinete presidencial "tomó el relevo".

Este guiño a la moda de fabricación patria le saldrá más caro al presidente francés que mantenerse fiel a su proveedor de toda la vida, ya que los trajes de Smuggler oscilan entre los 800 y los 1.200 euros. Hasta ahora, Macron compraba sus trajes, con los que prácticamente siempre aparece en público, en la casa parisina Jonas et Cie, en la que este tipo de vestimenta ronda los 400 euros.