Treya vivió 5 años atada en una casa abandonada de Missouri, en Estados Unidos, después de que su dueño fuera asesinado. Tras permanecer en esa situación tantos tiempo, la cuerda empezó a hacerle una herida muy dolorosa que hizo que la perrita searrancara la pata con su propia boca para poder escapar. Ahora vive con una familia adoptiva y está empezando una nueva vida.

Durante los años que estuvo atada, los vecinos le proporcionaroncomida y agua para que pudiera sobrevivir. Una vez Treya se liberó, fueron ellos los que avisaron a las autoridades, que a su vez llamaron a una protectora para que se encargara de ella.

Según el diario 'Daily Mail', se desconoce por qué los vecinos no alertaron antes sobre las circunstancias en las que se econtraba laperrita. El fundador de la protectora Stray Rescue, Randy Grim, ha explicado al diario local 'St.Louis Post-Distpatch' que el animal, además de perder la pata, ha desarrollado una dirofilarosis, una enfermedad parasitaria conocida también como enfermedad de gusano del corazón y una infección severa de la piel.

OTRA OPORTUNIDAD

Por otro lado, después de estar tanto tiempo sola, el animal desarrolló fobia al contacto con los seres humanos y otros animales, por lo que tenía bastante miedo. Sin embargo, ahora Treya está viviendo con una familia adoptiva que le está ayudando a relacionarse con otros animales y está tratando sus enfermedades. Además, se está recaudando dinero para comprar una prótesis para su pata.