La pandemia que, bajo el nombre de peste negra, desvastó a la población de la Europa Medieval en el siglo XIV, ha sembrado el pánico en la ciudad china de Yumen. La muerte de un hombre de 38 años el pasado 16 de julio por peste bubónica ha disparado las alarmas en China, que ha prohibido la entrada y salida de la ciudad y la ha declarado en cuarentena. El municipio de Yumen está situado en el oeste de la provincia de Gansu, en el noroesta del país. No es un territorio céntrico lo que reduce el riesgo de expansión de la enferme.

La causa de la infección y posterior muerte del hombre ha podido producirse por el contacto con una marmota muerta. Según la Televisión Central de China, el animal le habría contagiado con una bacteria llamada ‘yersinia pestis’ que produce, entre otras enfermedades, la peste bubónica.

Un mes en aislamiento

La ciudad de Yumen, con una población de 30.000 habitantes, ha sido puesta en cuarentena y han sometido a un análisis médico permanente a 151 persona que pudieron estar en contacto directo con el fallecido.

Los agentes de seguridad acordonan todos los alrededores de la ciudad para evitar la circulación de vehiculos y para que los conductores eviten los caminos próximos a Yumen. Aseguran que tienen suficiente alimento para abastecer a toda la población hasta dentro de un mes.

El diario local ‘Jiuquan Daily’ informa de que las autoridades gubernamentales de la ciudad han destinado 161.200 dólares a la vacunación inmediata y de emergencia para los habitantes de Yumen.

China es una de los países del mundo donde es más común la infección por esta enfermedad. En la actualidad los casos que se habían producido eran aislados y tenían lugar en poblaciones rurales. La propagación más común de la temida peste o muerte negra, como se la conocía en la antigüedad, se produce a través de las pulgas que contienen los roedores.

Otro caso en Bolivia

La peste negra también causó la muerte a un niño de diez años el pasado 17 de junio en Bolivia. El municipio de Apolo, situado al norte de la ciudad de La Paz, es donde se produjeron los hechos. Tres casos más están siendo atendidos por las autoridades sanitarias de ese país por posible contagio. La infección en este caso fue también por una pulga de un roedor, portador de la bactéria, que picó al pequeño de 10 años y se la contagió.