El presidente chino, Xi Jinping, ha pedido a su homólogo estadounidense, Donald Trump, "contención" para evitar más tensiones en la península de Corea, después de varios días de cruce de amenazas entre Washington y Pyongyang.

"Las partes implicadas (en alusión a EEUU y Corea del Norte) deben evitar declaraciones y acciones que aumenten la tensión", ha señalado Xi, quien ha mantenido la madrugada de este sábado una conversación telefónica con Trump.

También ha asegurado que China "está dispuesta a trabajar con el Gobierno estadounidense para resolver la cuestión", según informó la agencia oficial Xinhua.

Intereses comunes

"China y EEUU comparten interés en la desnuclearización y la paz en la península de Corea", ha añadido Xi en el diálogo telefónico, que se produce pocos días después de que Corea del Norte amenazara con bombardear la isla estadounidense de Guam, en el Pacífico.

Horas antes de la conversación entre Trump y Xi, el Ministerio de Asuntos Exteriores chino también pidió a Estados Unidos y Corea del Norte que "abandonen el viejo método de alardear de su poder" y "controlen sus palabras y acciones".

Poco antes, un diario ligado al Partido Comunista chino, el 'Global Times', analizó la situación de China ante un hipotético conflicto armado entre EEUU y Corea del Norte y subrayó que Pekín en ningún caso debería apoyar a Washington.

Posición neutral

Según el editorial de dicho diario, China debería ser neutral en el caso de que sea Corea del Norte -de la que fue aliada en la Guerra de Corea- la primera en atacar, y si en cambio es EEUU la que decide dar el paso, el régimen chino debería hacer todo lo posible por impedirlo.

Trump ha criticado en reiteradas ocasiones a China, el principal socio de Corea del Norte, por "no hacer nada" para resolver ese conflicto, aunque Pyongyang también ha mostrado su ira hacia Pekín por apoyar sanciones económicas contra el régimen en el Consejo de Seguridad de la ONU.

El conflicto actual se complica debido a la oposición de China a la instalación en territorio surcoreano del escudo antimisiles estadounidense THAAD, en teoría diseñado como defensa para armamento de Corea del Norte pero que según Pekín también amenaza su seguridad, ya que su radio de alcance incluye territorio chino.