Partido Conservador. El primer ministro británico se juega su futuro político.
Partido Laborista. Como servirse de su falta de carisma para ganarse al electorado.
Partido Nacional Escocés (SNP). El independentismo escocés sacude la política británica.
Partido Liberal-Demócrata. El político más tocado aún puede ser un socio de Gobierno determinante.
Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP). El populismo y la antiinmigración gana terreno mientras su líder puede perder el escaño.