Fuerzas del Ejército de Pakistán dispararon ayer contra dos helicópteros de Estados Unidos que penetraron en territorio paquistaní desde Afganistán. Los aparatos, que no fueron alcanzados, se vieron obligados a dar media vuelta y volver a su base. El incidente ocurrió cerca de la localidad de Angorada, en la provincia de Waziristán del Sur, conocido feudo de los talibanes y de militantes de Al Qaeda.

Según la televisión privada paquistaní Geo TV, los soldados abrieron fuego cuando los dos helicópteros intentaron entrar en el poblado, situado junto a la frontera con Afganistán. Un portavoz del Ejército de Pakistán, sin embargo, negó que las dos naves hubieran entrado en territorio paquistaní y que los dispararon procedieran de sus tropas.

La semana pasada, The New York Times reveló que en el mes de julio el presidente de EEUU, George Bush, dio luz verde para que tropas de su país penetraran en territorio de Pakistán sin consultar previamente al Gobierno de Islamabad. El 3 de septiembre se registró la primera incursión. Helicópteros y comandos especiales llevaron a cabo un operación militar también en Angorada, en la que murieron al menos 20 personas. Según el Pentágono, todos "terroristas". Las autoridades de Islamabad, no obstante, dijeron que los fallecidos eran civiles, entre ellos mujeres y niños.

El Gobierno de Islamabad advirtió entonces que defenderá "cueste lo que cueste" la soberanía de su país. Pakistán es uno de los grandes aliados de Estados Unidos en la lucha contra el terrorismo internacional. El mes pasado, el entonces presidente, el general Pervez Musharraf, se vio obligado a dimitir. La jefatura del Estado ha pasado a manos de Asif Ali Zardari, viudo de la asesinada Benazir Bhutto.