Dos incendios arden sin control en Nueva Zelanda, habiendo arrasado más de 2.000 hectáreas de terreno. Una persona ha muerto y un millar ha sido evacuadas 1.000 personas han sido evacuadas.

Los incendios comenzaron el lunes en Port Hills, cerca de la ciudad neozelandesa de Christchurch, informan medios locales y se han novilizado unos 130 bomberos, además de 14 helicópteros y tres aviones.

Las autoridades han declarado en emergencia a Christchurch y la aledaña localidad de Selwyn pero temen un aumento en la intensidad de los vientos del noreste, que podrían alcanzar los 45 kilómetros por hora, aviven las llamas y las empujen hacia las áreas residenciales.