La ministra francesa de Ecología, Ségolène Royal, advirtió hoy que sería "intolerable" cualquier posible contaminación por el paso por las proximidades de Córcega del crucero Costa Concordia en su ruta hacia Génova, donde debe ser desguazado. "Sería intolerable sufrir la menor contaminación, sería inimaginable", dijo Royal en declaraciones a la prensa en el Palacio del Elíseo con ocasión de la salida del Costa Concordia de la isla de Giglio, donde encalló en enero de 2012 en un accidente en el que murieron 32 personas y hubo decenas de heridos.

La ministra francesa recordó que mañana tiene previsto supervisar el paso del crucero siniestrado a una veintena de kilómetros del cabo Corse de la isla francesa desde un barco de la Marina especializado en misiones de asistencia y descontaminación -el "Jason"-, que se ha movilizado para esa operación. También insistió en que Francia no había sido advertida en un principio por las autoridades italianas del recorrido decidido para proceder al desguace, algo que calificó de "lamentable" teniendo en cuenta las implicaciones jurídicas por lo que respecta a las aguas territoriales, pero también al hecho de que se va a acercar a un área donde se está creando un parque natural marino.

La ministra lamentó asimismo que no se le hubieran dado explicaciones sobre por qué no se había desmantelado el Costa Concordia donde naufragó, lo que hubiera limitado los riesgos puesto que sigue habiendo en su interior una cantidad de hidrocarburos que no han podido ser extraídos.