El nuevo ministro de Finanzas griego, Yanis Varufakis, ha anuciado este viernes que el Gobierno griego no reconoce a la troika de acreedores -Banco Central Europeo (BCE), Comisión Europea (CE) y Fondo Monetario Internacional (FMI)- como interlocutora válida en las negociaciones sobre el programa de rescate de Grecia.

"No tenemos intención de trabajar con una comisión que no tiene razón de existir, incluso desde la perspectiva del Parlamento Europeo", ha dicho dijo Varufakis en una comparecencia conjunta con el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem.

Este ha sido el resultado de la priemera toma de contacto del nuevo Gobierno de Syriza con las autoridades económicas europeas. Antes de verse con Varufakis, Jeroen Dijsselbloen ha sido recibido en el palacio de Mégaru Maximu, por el jefe del Ejecutivo, Alexis Tsipras.

Según varias fuentes, Varufakis ha propuesto a Dijsselbloem una moratoria del pago de la deuda de cinco años, la liberación de los objetivos de superávit primarios, así como la convocatoria de una conferencia internacional sobre la deuda. Pero antes de viajar a Atenas, ha lanzado varias advertencias a Grecia, advirtiendo que si Syriza cumple sus promesas electorales, "el presupuesto estatal "se descarrilará muy pronto".