Los rebeldes de la provincia indonesia de Aceh completaron ayer su desarme, casi un año después de que el impacto y la destrucción causada por el tsunami en la región diese lugar al inicio de un proceso de paz para poner fin a tres décadas de conflicto armado en el norte de la isla de Sumatra. "A partir de hoy, el Movimiento para la Liberación de Aceh GAM, Gerakan Aceh Merdeka no tiene más armas porque han sido entregadas todas al equipo de la AMM Misión de Supervisión de Aceh para su destrucción", declaró un portavoz del organismo.

Los separatistas de Aceh han entregado en cuatro fases 1.001 armas, de las que la AMM ha aceptado 838, dos menos de las acordadas en el memorando rubricado en Helsinki el pasado agosto, aunque se esperaba alcanzar en cuestión de horas el número pactado. Los militares indonesios no reconocen 72 de las 838 armas entregadas por ser de construcción artesanal, pero la decisión última dependerá del grupo de observadores internacionales.

Paralelamente al desarme de la guerrilla, soldados y policías indonesios han ido abandonando la provincia. Después del 31 de diciembre, sólo deberán permanecer en Aceh 14.700 soldados y 9.100 agentes. Unos 3.000 excombatientes independentistas deben reinsertarse en una sociedad destrozada por la violencia. El conflicto en Aceh ha causado desde 1976 unos 15.000 muertos.