El primer francés, Manuel Valls , ha presentado esta mañana la dimisión de su Gobierno, según acaba de anunciar el presidente de Francia, François Hollande, quien le ha encargado la formación de un nuevo Ejecutivo. la consigna de Hollande ha dado a Valls es que sea "un equipo coherente con las orientaciones definidas para nuestro país". Una unidad de acción que había quedado en entredicho después de que este fin de semana los ministros de Economía y de Educación, Arnaud Montebourg y Benoît Hamon, respectivamente, criticaran públicamente la política del Ejecutivo. El anunció se ha hecho despúés de una reunión de una hora entre Hollande y Valls.
La dimisión del equipo de Gobierno llama la atención puesto que apenas ha durado en el cargo 147 días y que, cuando se les nombró, fueron bautizados como "el equipo de combate" de Hollande para remontar una gestión gubernamental en declive, como ya se demostró tras la devacle en las elecciones municipales. Sin embargo, la política de austeridad económica no tardó en abrir grietas entre los miembros del equipo de Gobierno. Unas diferencias que salieron a la luz el pasado sábado cuando, en una entrevista a Le Monde, el ministro de Economía, Arnaud Montebourg, reclamó un cambio de política económica señalando que era necesario "dar prioridad a la salida de la crisis y dejar en un segundo plano la reducción dogmática de los déficits, que solo conduce a la austeridad y al paro".
Líneas rojas
Esas declaraciones sentaron muy mal al primer ministro que, desde su entorno, señaló que el ministro, con esas declaraciones, había "traspasado unas líneas rojas". Sin embargo, el ministro díscolo recibió el apoyo del titular de la cartera de Educación, Benoît Hamon, con lo que la brecha interna se amplió.
