Miles de inmigrantes han llegando esta madrugada a la parte continental de Grecia, a la vez que el Gobierno heleno empieza a prepararse para discutir sobre nuevas medidas para tratar con el gran número de refugiados que llegan a sus costas. Toda la Unión Europea empieza a movilizarse activamente para hacer frente a una afluencia sin precedentes de inmigrantes.

Dos buques que transporte con más de 4.200 personas atracaron en el puerto de Pireo durante la noche, después de salir de la isla de Lesbos.

La agencia de control de fronteras de la UE, Frontex, asegura que la semana pasada 23.000 refugiados llegaron a Grecia, un 50% más que la semana anterior. En lo que va de año, solo en el país heleno ha registrado la entrada de 160.000 inmigrantes, superando con creces la cifra total del 2014.

El Gobierno del país, en plena crisis económica y política, carece de los recursos para asilar a la gran cantidad de refugiados, pero los grupos de ayuda piden a las autoridades que sean más solidarios.

CRISIS A NIVEL EUROPEO

El martes, el presidente griego, Prokopis Pavlopoulos, llamó a su homólogo francés, François Hollande, y pidió que la situación que atraviesa Grecia fuera discutida a nivel europeo para encontrar una solución conjunta.

El Gabinete provisional de Grecia ha convocado una reunión de emergencia para la tarde de este miércoles en la que se espera tomar las primeras decisiones para tratar con la problemática de la inmigración.

"SOMOS HUMANOS"

Los inmigrantes que alcanzan la costa griega suelen llegar a la isla de Kos o de Lesbos. En la segunda, según el diario Kathimerini, 17.500 personas llegaron solamente durante la última semana de agosto.

El martes, un ferry de llevó 1.749 inmigrantes de Lesbos hasta el puerto de El Pireo, cerca de Atenas. Otro zarpó llevando a bordo unas 2.500 personas más.

"Tienen que ayudarnos, somos humanos", pidió uno de los pasajeros de estas embarcaciones, un profesor sirio llamado Isham, al llegar a la Grecia continental.