El Parlamento Europeo (PE) ha aprobado nuevas normas para que la agencia de vigilancia de fronteras exteriores (Frontex) tenga reglas más claras de búsqueda y rescate de inmigrantes en el mar y prevenga así las muertes de los que intentan cruzar el Mediterráneo.

Según las estimaciones de los eurodiputados, unas 20.000 personas han fallecido en los últimos 20 años en el mar intentando llegar a Europa. Uno de los principales puntos del nuevo código de actuación para Frontex es estipular que las unidades que participen en situaciones de "urgencia" estarán obligadas a salvar las vidas de los inmigrantes.

Las nuevas normas de Frontex serán de aplicación para operaciones marítimas coordinada por la agencia europa, no para las que coordinen autoridades nacionales.

Con tal de proteger a las personas vulnerables, se establece que deberán procederse siempre que se intercepten personas a la identificación de las mismas, con el fin de garantizar que las personas que necesitan protección internacional, las víctimas de trata, los menores no acompañados y otras personas vulnerables reciben la asistencia adecuada. Más allá, se establece que solo se podrán tomar medidas coercitivas, como la detención, tras haber identificado a los inmigrantes.

Otro punto clave del nuevo código Frontex es la no devolución de inmigrantes en alta mar. Los interceptados tendrán que ser llevados a la costa para seguir los procedimientos. Además, se establece se refuerza el llamado "principio de no devolución", por el que no se reenviará a una persona a su país de origen o a cualquier otro Estado "si hay riesgo de tortura, persecución o riesgo de sufrir daños graves".

Los eurodiputados abogaron porque exista finalmente mayor solidaridad con los países que reciben de forma masiva inmigrantes y se ponga a su disposición en caso de flujos puntuales extraordinarios recursos humanos, técnicos y financieros.