El Ejército ruso asegura que ha llevado a cabo bombardeos en Siria de manera conjunta con Turquía. Se trataría de la primera vez que se da tal circunstancia entre los dos artífices de la frágil tregua siria y valedores de dos de los principales bandos enfrentados en el conflicto: Moscú respalda firmemente al presidente Bachar Asad, mientras que Ankara apoya a grupos rebeldes de la oposición.

El comandante ruso Sergey Rudskoy ha señalado este miércoles que las operaciones aéreas alcanzaron 36 objetivos del grupo yihadista Estado Islámico (EI) en la localidad de Al Bab, en el norte del país árabe y medio centenar de kilómetros al sur de la frontera turca.

La operación -en la que habrían participado varios cazas rusos Su-24, Su-25 y Su-35, además de F-16 y F-4 turcos- fue “altamente efectiva”, según Rudskoy, citado por la agencia de noticias turca Anadolu. “Los objetivos se decidieron por el Alto Mando de los dos países y en los dos últimos días se hizo observación” con drones, indicó el portavoz ruso.

MECANISMOS DE COORDINACIÓN

El pasado 12 de enero, el Ejército turco anunció en un comunicado que había firmado un acuerdo con Rusia que “sienta mecanismos de coordinación entre las Fuerzas Aéreas Rusas y las Turcas en el marco de nuestra ofensiva contra objetivos terroristas”.

Sin embargo, las Fuerzas Armadas de Turquía precisaron en un comunicado que se trató de una operación coordinada de manera conjunta pero ejecutada sin participación de vehículo militar turco alguno. Los ataques se produjeron “en el marco de reconciliación entre Turquía y Rusia” y los llevaron a cabo -según la versión turca- “aviones de las Fuerzas Aéreas de la Federación Rusa contra objetivos del Estado Islámico en el sur de Al Bab, como resultado de una buena coordinación con oficiales rusos”.

Ésta localidad ha sufrido numerosos bombardeos en los últimos días, entre ellos los cuatro llevados a cabo por aviones de Estados Unidos este martes. Estos ataques se producen pocos días antes de que comiencen las conversaciones de paz en Astaná, que dejan fuera a uno de los enemigos comunes de Asad y los rebeldes (el EI) y a las que el grupo yihadista Ahrar al Sham ya ha anunciado que no asistirá. Su inicio está previsto para el próximo día 23.