Qatar ha anunciado este martes que aumentará su producción de gas natural licuado en un 30%, en una demostración de fuerza en respuesta a las sanciones políticas y económicas que hace un mes le impusieron sus vecinos del Golfo bajo la acusación de apoyar el terrorismo.

Esta inesperada medida da la impresión de que Qatar se está preparando para una mayor independencia económica por si el conflicto con Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Bahrainse prolonga en el tiempo. Estos países decidieron el lunes dar 48 horas más a Qatar para que responda a sus 13 demandas, bajo amenaza de una ampliación de las sanciones.

En un encuentro en El Cairo, los ministros de Exteriores de los cuatro países citados decidirán este miércoles el mantenimiento, la ampliación o el levantamiento de las sanciones a Qatar, en función de la respuesta de las autoridades de Doha.

EL MEDIADOR

Qatar remitió el lunes su respuesta al emir de Kuwait, jeque Sabah al-Ahmad al-Sabah, que actúa como mediador en la crisis, pero no se ha revelado su contenido. Con anterioridad, Doha había rechazado implícitamente la lista de demandas de Arabia Saudí y sus aliados --entre las que destacan el cierre de la cadena de televisión Al Yazira y de una base militar turca, así como lareducción de las relaciones con Irán-- por considerarlas maximalistas y que atentan contra su soberanía.

La crisis estalló el pasado 5 de jiunio cuando Riad y sus aliados rompieron con Qatar, acusándolo de apoyar el terrorismo y acercarse demasiado al Irán chií, rival regional del reino saudí, país que lidera el islam suní. Doha rechaza las acusaciones y se niega a que le sea dictada su política exterior. "La lista de demandas está concebida para ser rechazada", declaró el pasado sábado el ministro qatarí de Asuntos Exteriores, jeque Mohamed ben Abderrahaman al Thani.