Las informaciones sobre el autor del atentado de Múnich aparecen con cuentagotas. Por ahora se sabe muy poco. Ha sido identificado como David S., de 18 años, y que tiene la doble nacionalidad alemana e iraní.

El jefe de la policía de Múnich, Hubertus Andra, ha señalado que el chico estaba obsesionado con las armas y con las matanzas. No obstante, en el registro de su viviendo no se ha encontrado ningún indicio de que hubiera actuado con simpatías por grupos yihadistas o de ultraderecha.

La policía de Múnich ha informado de que el joven estaba bajo tratamiento psiquiátrico por depresión. Se suicidó de un disparo en la cabeza. Para cometer la mascare empleó una pistola y llevaba encima cerca de 300 balas.

Los padres del joven estaban en estado de conmoción y aún no han podido declarar ante la policía.

NO ESTABA FICHADO

El chico vivía desde hace dos años en la ciudad. Varios medios informan que la policía y expertos forenses han entrado esta mañana en su apartamento, de donde se han llevado abundante material. Según los medios locales, el joven residía con sus padres en unos apartamentos sociales donde viven numerosos extranjeros. La policía no lo tenía fichado, ni sospechaba de que perteneciera a ninguna organización extremista de ningún tipo.

Durante el ataque, el asesino gritó a varias personas que, desde la distancia, le increpaban. En esa 'conversación', David S. gritó "soy alemán" y se refirió a los extranjeros con el término 'kanake', una expresión despectiva.