La salida de combatientes y civiles de los pueblos de mayoría chií de Fua y Kefraya, en el norte de Siria, y de áreas próximas a Damasco se reanudó hoy tras el atentado del pasado sábado contra un convoy de evacuados en el que más de un centenar de personas murió.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos indicó que 45 autobuses con 3.000 personas, entre ellas 700 combatientes leales al Gobierno sirio, abandonaron al amanecer Fua y Kefraya, sitiados por facciones islámicas entre las que figura el Organismo de Liberación del Levante, la alianza de la exfilial de Al Qaeda.

Esta caravana de vehículos se dirige a la ciudad de Alepo, bajo el control del Ejército sirio.

Mientras, once autobuses con 158 personas, en su mayoría civiles, salieron de áreas al noroeste de Damasco, así como otras 60 de los montes del este de la población de Al Zabadani y cien milicianos de la zona de Sargaya, con dirección a la provincia de Idleb, dominada casi totalmente por las facciones.

La ONG apuntó que de esta manera se completa una nueva etapa del acuerdo logrado en marzo pasado entre las autoridades y grupos rebeldes para la evacuación de las localidades asediadas de Fua, Kefraya, Madaya y Al Zabadani, así como de zonas de la periferia de Damasco.

Las primeras evacuaciones se realizaron el fin de semana pasado, pero se interrumpieron después de que al menos 126 personas de Fua y Kefraya perdieron la vida en un atentado contra los autobuses en los que se trasladaban en el área de Al Rashidín, en el extrarradio de Alepo, que no ha sido reivindicado por ningún grupo.

Estas evacuaciones se enmarcan dentro de la estrategia del Gobierno sirio de alcanzar lo que denomina "procesos de reconciliación nacional".

Dichos procesos son, en la práctica, acuerdos de rendición que se aplican en áreas sitiadas y que se alcanzan tras negociaciones entre las autoridades y grupos rebeldes locales.

Normalmente se implementan en áreas rodeadas por los leales al presidente sirio, Bachar al Asad, aunque también se han dado casos, como el de los pueblos de mayoría chií de Fua y Kefraya, sitiados por grupos islámicos, entre ellos el Organismo de Liberación del Levante.