El ministro del Interior italiano y líder de la ultraderechista Liga, Matteo Salvini, ha exigido a Europa que haga algo con la inmigración "o que calle para siempre", durante la comparecencia de este miércoles en el Senado para explicar el rechazo al barco "Aquarius" con 629 inmigrantes.

Salvini ha explicado que ha leído en los medios de comunicación que Italia "se ha quedado sola", pero ha considerado que "nunca ha estado tan centrada como ahora" y que en estos días ha mantenido contactos con muchos homólogos. europeos.

Entre ellos ha citado su conversación con el alemán, Horst Seehofer, con quien coincidió en la necesidad de una propuesta de protección de las fronteras externas de la Unión Europea (UE). "Italia no puede ser la única que se ocupa de esto y que se hace cargo de los costes económicos y sociales que esto supone. Si existe Europa que se haga oír o calle para siempre", ha agregado.

El ministro del Interior italiano ha reiterado la posición de Italia sobre la necesidad de superar el Reglamento de Dublín, que establece las normas para el reparto de inmigrantes en la Unión Europea. Al respecto adelantó que junto con Austria, que asumirá el 1 de julio la presidencia de turno de la UE, y Alemania se harán portavoces de una nueva iniciativa sobre la reforma de Dublín.

Al respecto del caso "Aquarius", Salvini ha aseverado que "Italia no acepta lecciones de solidaridad y de humanidad de nadie" y ha agradecido "a los amigos españoles su buen corazón" por haber acogido al barco humanitario de la ONG francesa SOS Méditerranèe y de Médicos sin Fronteras (MSF), pero ha recordado que el Gobierno de "Pedro Sánchez tiene amplio margen para ejercitar su solidaridad en las próximas semanas" ya que, ha agregado "solo cuenta con cerca 16.000 demandantes de asilo mientras que en Italia hay 170.000".

Salvini también ha exigido que Francia pida perdón a Italia después de que el presidente francés, Emmanuel Macron, denunció ayer el "cinismo" y la "irresponsabilidad" del Gobierno de Italia en la gestión del "Aquarius". Ha subrayado que Francia ha devuelto a su país a más de 10.000 personas que cruzaron la frontera y ha invitado a Macron a ejercer su solidaridad y hacerse cargo de los 9.000 inmigrantes presentes en Italia que se habían comprometido a acoger "y de los que solo se ha hecho cargo de 640".

El ministro del Interior del nuevo Gobierno apoyado por la Liga y el antisistema Movimiento 5 Estrellas (M5S) ha cargado también contra las oenegés que salvan vidas en el Mediterráneo al denunciar de que existen "asociaciones privadas financiadas a saber por quién". "Aunque después leo que detrás de algunas está Open Society de (George) Soros, y me asaltan las dudas sobre la espontaneidad de toda esta generosidad", ha acusado.

Por otra parte, Salvini ha afirmado que "está harto de ver niños muertos en el mar" porque les "colocan en una lancha y les mienten prometiéndoles que hay futuro" y ha dicho que son "muertos de Estado". Ha denunciado también el "negocio" de los demandantes de asilo y de los abogados de oficio que se lucran con las causas de estas personas y ha asegurado que solo el 11% de las peticiones de asilo político se acogen "porque el resto no tienen ningún fundamento".

Estas afirmaciones han provocado las protestas por parte de los senadores del Partido Demócrata (PD) y otros grupos y a los que Salvini ha contestado que si "prefieren hacer negocios que se vayan a una cooperativa (que ayuda a los inmigrantes) y dejen el Senado".