Rusia amaneció ayer en estado de conmoción. Al menos 64 personas, entre las que se encuentran nueve niños, perdieron la vida en un incendio declarado en un centro comercial de Kémerovo, una ciudad minera en Siberia occidental. Es muy probable que el número de fallecidos aumente. La tragedia tuvo lugar en el centro comercial Zhimniaia Vishnia (Cereza de invierno), que había abierto sus puertas hace menos de cinco años.

Más de seis horas tardaron los bomberos desplazados en el siniestro en controlar el fuego, que devastó un edificio de 1.500 metros cuadrados. En algunos casos, algunas de las personas del interior del edificio llegaron a saltar desde dos y tres alturas para evitar las llamas, como es el caso de un niño de 11 años y una joven de 18, que se encuentran hospitalizados en estado muy grave.

En declaraciones a la televisión rusa, algunos testigos aseguraron que todo sucedió de forma rápida, sin que mediara ningún anuncio ni que funcionara ninguna alarma. Algunas de las salidas del centro comercial estaban incluso cerradas, según se ha publicado. «No ha habido ninguna advertencia; la gente ha comenzado a correr hacia la salida; en seguida, hemos percibido un olor a quemado y hemos comenzado a entender que no era un simulacro», declaró una mujer.

Los supervivientes y sus familiares fueron agrupados en el gimnasio de una escuela cercana, donde esperaron información y la visita de representantes del Ministerio para las Situaciones de Emergencia.

«Huí por la escalera, y alguien me dio un trapo húmedo. Cuando alcancé el piso cuarto, rompí la ventana, y después me caí; mi hija me llamaba por teléfono una y otra vez, yo le gritaba que intentara salir de la sala, pero no pudo hacerlo, el fuego ya estaba delante de ella», explicó Aleksándr al medio digital Meduza.

Los orígenes del pavoroso incendio están todavía por determinar. Fuentes de los equipos de rescate informaron a la agencia Interfax que el fuego pudo ser causado por defectos en el cableado eléctrico. Por su parte, el vicegobernador de la región de Kémerovo, Vladímir Chernov, especuló que podría haberse producido una ignición en una de las salas de cine. Una tercera versión habla de que el fuego pudo iniciarse en la sala infantil, donde uno de los niños podría haber hecho uso de un mechero. Las autoridades han abierto una investigación por «violación de las normas de seguridad».

Cadena de juguetería

En el momento del incendio, el centro comercial estaba repleto de público, incluyendo numerosos menores de edad. Entre las empresas que contaban con locales en el centro se halla Destkii Mir (Mundo infantil), la principal cadena de juguetería de Rusia. Según informó la cadena de televisión Dozhd, se hallaban 12 alumnos del 5º curso de una escuela local, así como estudiantes de otro centro educativo de Tomsk.

El presidente de Rusia, Vladímir Putin, transmitió sus «profundas condolencias a los familiares y allegados de aquéllos que han muerto» a través de una declaración emitida ayer por el Kremlin. En lugares aledaños al escenario de la tragedia, de forma espontánea, grandes grupos de ciudadanos se acercaron a depositar flores.