El presidente de EEUU, Donald Trump, señaló ayer que planea que militares estadounidenses se encarguen de vigilar la frontera con México hasta que se construya un muro. «Hasta que podamos tener un muro y seguridad adecuada, vamos a estar vigilando nuestra frontera con nuestras Fuerzas Armadas, señaló.

Mientras, las autoridades mexicanas han tomado medidas para desmantelar la marcha reivindicativa de cientos de inmigrantes centroamericanos que pretendía atravesar México para llegar hasta la frontera de Estados Unidos. La decisión del Gobierno de Enrique Peña Nieto llega unas horas después de que Trump lanzara diversas amenazas contra los países de origen de los inmigrantes en las redes sociales. Trump interpeló a México para que actuara afirmando que está en juego la continuidad del tratado de libre comercio y amenazó directamente a Honduras (y por alusión, a otros países centroamericanos) con quitarle las ayudas económicas.

Más de 1.200 inmigrantes participaban en la marcha, que desde el pasado 25 de marzo aspiraba a recorrer 3.200 kilómetros para llegar a la frontera de EEUU. La columna estaba formada principalmente por guatemaltecos, hondureños y salvadoreños y está organizada por la oenegé Pueblo Sin Fronteras.