La Comisión Europea ha criticado este miércoles la decisión del Gobierno belga de imponer a los periodistas una acreditación de pago para poder cubrir las cumbres de la UE en Bruselas. La Comisión asegura estar dispuesta a examinar todas las medidas posibles contra esta medida, considerada "discriminatoria" por las asociaciones profesionales.

"La idea no nos gusta", ha declarado la portavoz adjunta de la Comisión, Mina Andreeva. "La Comisión, en tanto que guardián de los tratados, puede emprender denuncias, y las examinará sobre la base del derecho", ha amnenazado.

El Gobierno belga ha instaurado una tasa de 50 euros semestrales para cubrir los gastos generados por los controles de seguridad impuestos en los accesos a los "lugares sensibles", entre ellos las instalaciones que acogen las reuniones semestrales de los dirigentes de los Veintiocho en Bruselas.

Para la cumbre del 18-O

La información fue comunicada a los periodistas como un aviso en la demanda de acreditación para la cumbre del 18 de octubre.

La Asociación Internacional de la Prensa (API) y la Asociación General de Periodistas Profesionales de Bélgica han enviado cartas de protesta al Ejecutivo belga y han reclamado al primer ministro, Charles Michel, "abandonar inmediatamente" esta tasa, al entender que supone "una violación de la libertad de informar".