Llevamos mucho tiempo hablando que cuando se trata de consumir drogas lo importante es la prevención.Las maneras de hacer prevención han ido cambiando a lo largo de los años, y como ocurre casi siempre con la prevención, nos quedamos cortos, ya que hay un número importante de personas que consumen drogas y que acabarán teniendo problemas con ese consumo.

Últimamente se habla mucho del modelo que Islandia ha adoptado en materia de prevención, ya que está cosechando importantes logros. Hace apenas 20 años, los adolescentes de ese país figuraban entre los más bebedores de Europa. Ahora destacan entre los que siguen un estilo de vida más saludable. También ha disminuido de manera considerable el consumo de cannabis.

El modelo tiene en cuenta los factores personales de los individuos, pero incluye también factores sociales y familiares. El modelo tiene en cuenta la necesidad de experimentación y de nuevas sensaciones que necesitan los adolescentes, creando espacios de diversión y de ocio acordes con los gustos y prioridades de ellos.

Al mismo tiempo, fomenta las actividades compartidas, donde el trabajo en equipo y la aceptación de las propias limitaciones son objetivos a conseguir, intentando mitigar la carga de angustia que la competitividad y el éxito social exige a la mayoría de los adolescentes y jóvenes.

Para poder realizar estos planes lo primero que se ha hecho es involucrar a los profesores y a los padres. El programa pone el énfasis en la importancia de dedicar tiempo, acompañamiento y vigilancia de los hijos. Son los padres los supervisores de cómo sus hijos utilizan el tiempo libre, dedicándoles más tiempo. No solo es tiempo de calidad sino más tiempo de estar al lado.

Por ultimo, la medida más polémica consiste en una especie de toque de queda acordado por los padres y los agentes sociales y políticos donde los menores de edad no pueden salir solos a partir de una cierta hora.

No pretendo implantar la copia de este modelo entre nuestra sociedad donde el clima, las costumbres y las relaciones son tan diferentes a las islandesas. Pero sí que sirva a modo de reflexión de cuantas horas del tiempo libre de nuestros hijos pasamos con ellos y si sabemos realmente como lo utilizan.

Como dato, la Agencia Antidroga de Madrid indica que el 50% de los menores que sale el fin de semana llega a casa después de las dos de la madrugada. T