Un año más las fiestas de Almonacid de la Sierra llenaron sus calles de animación y el buen tiempo fue uno de los factores importantes para que todos sus vecinos y visitantes salieran a la calle a disfrutar de los numerosos actos programados. Una variada oferta entre la que destacaron las sesiones de vaquillas, que debido a la gran afición que existe en la localidad se pudieron disfrutar cada tarde.

Los niños tambien se lo pasaron en grande y disfrutaron de su día con un parque infantil con hinchables, toro mecánico y una gran fiesta de la espuma para terminar. Tampoco hay que olvidarse de la música que acompañó a los habitantes de Almonacid con orquestas y discomóviles a lo largo de las fiestas y la diversidad de actuaciones como la del grupo de jotas, actuaciones variadas de café concierto como la del conocido Javier Segarra, la revista de variedades y un espectáculo de magia que atrajo a numeroso publico.

EL HOMBRE DE NEGRO

Además, un curioso personaje acompañó a los vecinos durante todas las fiestas, acudiendo a los actos programados disfrazado completamente de negro con una gabardina, sombrero y una máscara que cubría su rostro y acompañado de una silla que se colocaba en el hombro. Su forma de actuar era llegar a cada acto programado, una vez comenzado este aparecía con su silla y se sentaba en un lugar visible y permanecía inmóvil durante aproximadamente 20 minutos, después cogía su silla se la colocaba en el hombro y se marchaba. Así cada día de las fiestas.

Este hecho tuvo en vilo a todos los vecinos y fue comentario popular en todos los grupos durante las fiestas ya que cada uno hacía su propio juicio de quién podía ser este curioso personaje. En el fin de fiestas, después de la retreta, se descubrió quién era este personaje, que resultó ser no uno sino hasta cinco vecinos que se fueron turnando el disfraz y apareciendo en los variados y numerosos actos.