El nuevo centro de salud del barrio de la Almozara ya ha abierto sus puertas. Lo hizo el 16 de febrero. Unos días antes, la presidenta del Ejecutivo autonómico, Luisa Fernanda Rudi, visitó el nuevo equipamiento que da servicio a 22.602 vecinos, de los cuales 2.293 serán niños.

El día de su apertura, el nuevo centro de salud congregó a muchos usuarios, que se movían por el edificio entre la novedad y la desorientación propias del primer día.

De hecho, no fue raro encontrarse a varios vecinos preguntando al personal dónde estaba la consulta de su médico al que tenían que acudir o mirando el cartel de la entrada del Salud en el que se recoge la información y su ubicación en las diferentes plantas. "La gente está un poco perdida, pero es normal, poco a poco se irán acostumbrando", apuntaron fuentes internas del centro.

A las 11.15 horas, numerosas personas guardaban fila en admisión. El 16 de febrero, excepcionalmente, se abrieron las consultas a las 11.00 horas, para que en las dos horas previas los médicos y todo el personal pudieran ubicarse. De ahí la fila, "es algo puntual", añadieron. "Esto es una maravilla, ahora a ver qué resultado da. Hemos venido a tomarnos la tensión y ha ido todo muy bien. Nos gusta mucho", apuntó Margarita La Riva, acompañada por su marido José María Portero

Ya en la calle, los usuarios valoraron "positivamente" su primera consulta. "A mi me llamaron unos días antes para decirme que la visita con mi médico ya la tendría aquí. El antiguo centro era pequeño y este es muy espacioso", apuntó Javier Ferrer.

A su lado, Óscar Ortín no opinó lo mismo. "Creo que deberían dejar abiertos los dos centros de salud, porque si uno tiene una urgencia grave, y el otro está más cerca, sería lo más adecuado que pudiera ir allí. Se le podría haber dado uso", añadió.

Enfermería y Admisión son dos de los sectores más beneficiados por el cambio de ubicación. "Este espacioso, amplio, estamos muy contentos. En el otro centro había profesionales que compartíamos cuartos para pasar consulta. Y la parte administrativa era muy cutre", señaló Maribel Blasco, responsable de Enfermería.

Igualmente, la satisfacción también ha llegado a las farmacias cercanas, como la de Esperanza Andreu, quien confía en ganar "algo" de clientela. "Habrá quien opte por traer la receta nada más salir de consulta", dijo.

VISITA INSTITUCIONAL

La presidenta de la comunidad aragonesa, Luisa Fernanda Rudi, visitó el 11 de febrero las nuevas instalaciones sanitarias junto al consejero de Sanidad, Ricardo Oliván. Pasearon por algunas de las 34 consultas de las que dispone el ambulatorio y pudieron conocer de primera mano el gimnasio o las salas de uso polivalente. El nuevo centro también cuenta con áreas de atención al usuario, administración, zona de preparación al parto, docencia y formación y servicios generales.

Rudi reconoció que este centro ha sido un edificio "largamente demandado", ya que todas las instalaciones, tanto sanitarias, como educativas, son las más demandadas porque se trata de los servicios que más afectan a los ciudadanos. Aseguró, también, que le hubiera gustado "avanzar más en esta legislatura" en mejora y desarrollo de equipamientos sanitarios pero explicó que "hay proyectos que están en marcha y se ejecutarán en la que viene". Acusó a la crisis de esta falta de avance. "Ha sido una época de escasez de recursos para inversiones y hemos dado de sí lo que hemos podido", argumentó.

Este nuevo ambulatorio aporta un edificio con mayor capacidad respecto al centro antiguo, ya que se trata de un espacio tres veces más grande que el anterior. A diferencia de los 1.400 metros cuadrados del situado en la calle Batalla de Almansa, las instalaciones actuales cuentan con 4.879 metros, y con mucha más luz y salas de consulta más amplias.

El edificio se ha levantado sobre una superficie de 1.855 metros cuadrados en la avenida de la Autonomía, dentro de un parque equipado que desarrolla urbanísticamente ZAV (Zaragoza Alta Velocidad). Se adjudicó en diciembre del 2011 a la empresa Dragados SA por una cuantía de 4,5 millones de euros. En diciembre del 2012 se adjudicaron las obras que finalizaron el pasado 20 de noviembre y hasta ahora se han estado equipando las instalaciones. Se han destinado 250.860 euros a mobiliario general, clínico, aparataje y dotación informática.

Todavía quedan algunas salas por equipar totalmente, que se completarán con material procedente del antiguo centro de salud.

Estos recursos serán utilizados por un total de 48 trabajadores: 18 médicos de familia, tres pediatras, 17 enfermeras, una matrona, un fisioterapeuta, un trabajador social, un auxiliar de enfermería, cinco administrativos y un celador.